Menospreciar por el habla: un sabio andaluz (post-218)
Hace unas semanas tuve una conversación con alguien que se sinceró diciéndome que cuando escuchaba a un andaluz, “hablando tan mal”, tendía a quitarle mérito. Que “hablar mal”, entendido como comerse tantas letras, le parecía impropio de una persona inteligente.
Suelo poner mucha atención a la gente que se atreve a ser políticamente incorrecta porque comparte opiniones desde la franqueza, y yo eso lo valoro un montón. No abunda, ¿sabes?, y además te da la oportunidad de revisar juntos esa idea, y poner a prueba si se sostiene. Si la calla, entonces no hay nada que hacer…
Era una conversación privada, así que cabía de todo. Estoy seguro que se atrevió a decírmelo porque (por mi origen) no me considera andaluz, a pesar de que yo como cubano también me como muuuuchas letras. Compartimos cubanos y andaluces ese plus de adrenalina que nos lleva a querer hablar más rápido de lo que pensamos.
Me quedé con esa historia en la cabeza porque no es una anécdota cualquiera. Es un buen ejemplo de lo empobrecedor que puede ser el abuso de estereotipos. También de lo simplones que son algunos a la hora de medir la inteligencia de la gente, a los que yo les pondría a leer (solo para empezar) la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, un estupendo punto de partida para entender la diversidad.
En esas… Ana me pasó un vídeo, de esos que le gusta paladear a ella un ratillo antes de irse a dormir, en el que un tal José María Pérez Orozco, que ni conocía… contaba una historia sobre el desprecio y la subestimación del habla andaluza.
Resulta que este tío es un respetado catedrático de Lengua, que si entra a un bar a pedirse una cerveza, nadie pensaría que lo es (recuerda, los tópicos y el borreguismo mental). Y para más inri, la anécdota que cuenta va de béticos, porque el tío coincide conmigo en el mismo buen gusto 🙂 por lo verdiblanco.
He disfrutado mogollón escuchándole. Un descubrimiento, vaya. Qué gracia y sabiduría tiene el jodío, así que va directo a engrosar mi galería de ídolos populares donde también están Labordeta, Jesús Quintero y muchos más. Lo que explica este hombre sobre los arcaísmos del andaluz y por qué debe considerarse un dialecto tan respetable como los demás, es para nota.
Comparto aquí dos vídeos, porque no podía prescindir de ninguno. El primero cuenta una lección de las que molan: lo que les suele ocurrir a aquellos que menosprecian por la forma de hablar, con sorpresita incluida. En el segundo me he parti’o de la risa con el recital que da el bueno de D. José María mientras analiza la frase “No, ni, na…”.
Que los disfrutéis, y me contáis que os ha parecido…
Juan Antonio
Muy Simpático el vídeo Amalio, un poco vacileta para mi gusto, yo hubiese sido más prudente, pero no se le puede negar el don de palabra y el alto conocimiento sobre la materia.
Yo soy un amante de esta tierra, es más, conozco poco más allá de despeñaperros, pero creo que es de los poco sitios del mundo donde le puedes decir a alguien «eres un hijo de puta» como una expresión tal como «que io puta eres» y tomarlo hasta como un cumplido, puesto que tenemos un dominio exquisito de transformar prácticamente cualquier frase sólo con la forma de expresarnos, y cambiar totalmente su significado.
El sentido del humor lo tenemos arraigado a la forma de expresarnos, y eso no debe ser algo negativo, sino justamente lo contrario, tenemos la cualidad de saber reírnos de nosotros mismos, pues disfrutemos cada día de ello que seguro es hasta sano.
Juan Antonio
En cuanto al vídeo de Iñaki Perurena… me ha gustado como el presentador se come un poco sus propias palabras conforme el levantador de piedras va mostrando el conocimiento de su tierra… pero no me ha gustado un cierto aire de agresividad al final del vídeo, el reportero da la sensación de cuando ha bajado la guardia y se ha disculpado…, el levantador de piedra se crece, le suelta una frase en euskera, en plan frase para recordar, (que desconozco el significado) y un ¡¡¡eh!!!!???… como diciendo: «ale… para casa con tú programita que me tienes ya hasta lo witos»
Vamos… que si se queda 10 minutos más le hace comer la piedra, y un par de libros de historia del antiguo reino de navarra, jajajaja.
Amalio
Por supuesto, puedes hacer lo que quieras…
un saludo
Joloro
¡Magnífico, Amalio! ¿Lo puedo enlazar o compartir en facebook?.
josean rodriguez
Amalio,
Un video por otro. Humildemente os invito a que veais este video sobre la entrevista que un periodista hizo a nuestro querido levantador de piedra ( harrijasotzaile ) Inazio Perurena.
Es su última parte, para entonces el «periodista» le había tocado bastante las narices con asuntos sobre el deporte rural vasco de levantamiento de piedra e identidad vasca, el humilde «harrijasotzaile» le explica lo siguiente en un castellano no precisamente impecable por su acento…
Amalio
Josean:
He mirado con atención el vídeo. La verdad es que no veo con claridad la conexión entre un vídeo y el otro. Pienso que el periodista intenta hacer una pregunta que se haría mucha gente, y esa es su función, lo que pasa es que no se informa bien y se vé bastante superficial.
El periodista no encaja la argumentación de Perurena porque se ha atrevido a moverse en un terreno que no entiende en absoluto por su ignorancia (a mí me parece, incluso, que está bebido… o no sé si habla siempre así). Pero OJO, lo que pregunta NO es «un prejuicio», sino una duda comprensible que está en la cabeza de mucha gente, que tiene que ver con razones históricas, culturales e ideológicas que admiten muchas lecturas, y no solo la que hace el levantador de piedra por mucha convicción que ponga en la palabra.
¿Dónde poner el «inicio de la historia»? ya sabes que es un temita peliagudo, y la divergencia de puntos de vista no obedecen todos a prejuicios o ignorancia, sino también a explicaciones más complejas que no cabría analizar en este espacio…
Y advierto que no tengo posicionamiento alguno respecto de esto porque me queda muy lejano…
Un abrazo
josean rodriguez
El relato efectivamente es interesante y aleccionador. Sin embargo a mí se me atraganta en su inicio y me explico.
Tengo la sensación de que se combate un «prejuicio» con otro. Esto es, el catedrático describe a sus maleducadas acompañantes como unas periodistas «abertzales».
De verdad le constaba su adscripción política, o por el hecho de ser vascas, las etiquetó como abertzales?
Y en el caso de que así fuese, dejenme que yo dude que de un encuentro mas o menos casual pueda este señor saber a quien votan, el modo en que las etiqueta a mí francamente me suena con una intencionalidad nada noble, al menos tan poco noble como lo que estas maledudas e ignorantes señoritas cometieron con él.
Sin acritud. Un abrazo Amalio
Amalio
Josean:
Tienes razón en lo que comentas. A mí tampoco me gustó ese comentario porque creo que lo descalifica en cierta medida. Pero también habría que ver quién agrede, y quién se defiende. No lo justifico, creo que en efecto devuelve un prejuicio con otro, y eso no está bien… pero a mí siempre me ha gustado buscar dónde está el origen de las cosas. Sentir que te subestiman o te atacan no es agradable, y eso puede hacer que pierdas un poco el norte.
Mi opinión a tu pregunta es que no creo, en absoluto, que supiera la adscripción política de las periodistas, y que ha tirado de etiquetas, de tópicos, y eso es incoherente con lo que defiende.
Pero como ya te he dicho, no reparto culpas por igual, porque pienso que es más innoble quien ataca primero…
Por supuesto que sin acritud, amigo… Tu observación es inteligente y correcta. Yo la comparto, que conste 🙂
Un abrazo
Leonardo Iroz
Que delicia escuchar a este hombre . . .
Me ha encantado 🙂
Amalio
Gracias, Leonardo, por pasarte por aqui. Yo también, como puedes ver, he disfrutado mucho con estos dos videos… Me alegro que te haya gustado.
QQ
Hola Amalio! ya conocía este video de antes, es buenisimo, a mi me causó un impacto tremendo, mas que nada porque estas viendo que tienes delante a un tio que intelectualmente impone, teniendo ese acento andaluz.
En mi opinión por mucho que queramos culpar a los prejuicios, están ahi por algo. El problema es que queremos acertar siempre con la menor información posible.
Un fuerte abrazo!
PS: no se si has visto el video «curso de andaluz», mientras que este video de este señor derriba prejuicios, el cursodandalú es para partirse de risa!
Amalio
Muy bueno, Enrique!!!
El tío «intelectualmente impone», sobre todo desde la humildad… y eso impone más.
El diagnóstico que haces es perfecto, das en el clavo, colega: «queremos acertar siempre con la menor información posible». ¡¡es así!! Mejor explicado imposible 🙂
Es esa vagancia mental que ahora se acrecienta con «lo fácil» que aparentemente disponemos de información. Pero la conversión de ésta en conocimiento es otra cosa. Estamos perdiendo cada vez más la paciencia, y eso aumenta la tentación de echar mano de los estereotipos.
Un abrazo
Manolo Queen
El io puchi. Es un monstruo. Vaya tela lo que endiquela el gachó. No vea lo que sabeeee. Asina cualquiera. ¡Puta madre!
Amalio
¡¡¡Manoloooo!!! que alegría verte por aquí, suegro.
Vaya, tela, no?? El tío sabe un montonazo… a mi me ha encantao…
un abrazo 🙂
davidrjordan
Que peaso de monstruo está hecho el gachón! Y anda que no tiene razón ni ná en los estereotipos y prejuicios que sufrimos los andaluces na más abrir la boca. Pero, ¿y lo que nos hartamos de reír nosotros mismos? Ah! Por cierto, y que como diría mi padre, que sí, que viva er Betis manque pierda.
Ea, condió 😉
Amalio
David:
jjj…. «el gachón»… qué arte!!
Eso es lo mejor, hartarse de tronche… reirnos de nosotros mismos, es algo tan común por estas tierras que tiene un efecto tan saludable que algún día tendremos que medir.
Eso d «viva el Betis manque pierda» tiene aún más sentido hoy despues de cosechar la cuarta derrota consecutiva… pufff…. empiezo a verle las orejas al lobo…
Juanra Doral
Qué razón tienes. En general, etiquetar basado en prejuicios siempre es un error que, por desgracia, es muy habitual. Especialmente, es fácil quedarse en la forma, tanto en la de hablar como en la de vestir, aspecto, procedencia…, sin llegar al fondo.
Amalio
Hola, Juanra: Etiquetar es empobrecedor, y como bien dices, es tristemente habitual. Caemos todos en ello, y por eso conviene que lo recordamos. Estar alertas para no dejarnos llevar por el borreguismo mental… o sea, no caer en la tentación de pensar en piloto automático… un abrazo
olga r.
Los andaluces, además de comerse las letras, tienen otra peculiaridad: usan más figuras literarias. Antes que un neologismo, una metáfora.
Amalio
Tienes razón, Olga, el uso de la metáfora es algo que marca mucho el habla andaluza, y le impregna de sentido poético.