Soy consultor (con perdón), y me gusta serlo. Pero sé que esta profesión va en camino de un gran revolcón para adaptarse a un nuevo escenario donde el cambio y las interacciones son más dinámicos, y el conocimiento adquiere una dimensión mucho más libre...
Me une una relación de amor-odio con las etiquetas porque hacen la comunicación asombrosamente eficiente pero también provocan generalizaciones injustas....