Con genio y guasa (post-196)
Este es mi tercer y último post del seriado que he venido escribiendo sobre el genio creativo de los niños.
En mi primera entrada recreaba la figura de los críos como sabios y poetas, y en la siguiente publiqué una colección de pensamientos infantiles por aportar un puntito de frescura al puente del Pilar.
Con este post completo mi recopilatorio que espero disfrutéis tanto como yo:
CONEXIONES: Observando sin prejuicios
- Dudas razonables: Carlota (6 años) preguntó: “Mamá, ¿cómo se pudieron quedar embarazados Adán y Eva si solamente comían fruta, y la fruta no engorda?”.
- ¿Qué es un examen?: “Es un papelito en el que demuestras que eres muy bueno a la profesora. Es como Hacienda”.
- Colores malditos: A Eva (6 años) no le gustan mucho ni las princesas ni las cosas de niñas, y menos el color rosa. Un día la madre le preguntó “¿Pero por qué no quieres nunca el rosa?” y le contestó: “Porque es el color de las Barbies y de las multas”
- ¿Qué hace un socorrista?: “Se sientan en sillas muy altas para que no les robes sus cosas mientras rescatan”.
- Confusión de géneros: Un día Fabio (9 años) le preguntó a su madre: “Mamá, si me gustan las chicas, entonces, ¿soy lesbiano?”
- ¿Por qué son tan caras las casas?: “Creo que tiene algo que ver con Marbella…”
- ¿Qué es un psicólogo?: “El psicólogo es un tipo de doctor que no te pone el termómetro”
- Visto lo visto: Antonio iba en coche con su mamá y ésta le dijo que si no se portaba bien lo iba a cambiar por otro niño, así que Antonio le contestó “Mamá, no se te ocurra ponerme los cuernos”
- Paralelismos morfológicos: Un día, hablando de las cosas que daba cada animal, Charlie (5 años) dijo: “las ovejas dan lana, las vacas dan leche y los cerdos dan la mierda que son los chorizos”
- Vampiro precoz: David (4 años) sentía miedo de estar solo de noche al dormir, y su madre le dijo: “No te preocupes, no estás solo, estas con tus peluches Osito y Burrito”, entonces él respondió: “Ya, pero es que yo quiero estar con alguien que tenga sangre”.
- Simetrías: Héctor (4 años) se tiró un pedo y se puso la mano en el culo, y su madre le preguntó por qué lo hacía, y el niño respondió: “Si cuando me tiro un eructo me pongo la mano en la boca, cuando me tiro un pedo me pongo la mano en el culo”.
- Pares dialécticos: Cuando le preguntaron a su madre si Ana iba a hacer la comunión, dijo “No, no la va a hacer, es que nosotros no somos muy de iglesia…” Y Ana aclaró: “No, nosotros somos más de Ayuntamiento”.
SIMPLIFICANDO: Déjate de rollos, vamos al grano, porque lo digo yo
- ¿Por qué los adultos no entienden a los niños?: “Los mayores solo entienden de besarse en la boca”.
- Una de géneros: Celia (3 años) quería jugar con su primo a cuentos de princesas, pero él no quería ser príncipe, ni caballero, ni nada, así que ella muy enfadada le dijo “Vale, sé tú mismo y abúrrete”
- Vehemencia: Daniel (4 años), cuando fue a ver a los Reyes Magos estas navidades, el rey le preguntó: “¿Has sido bueno este año?”, y él le contestó: “Sí, y no lo quiero discutir más”.
- ¿A ti que te flipa?: “Cuando hay algo que ha pasado que no se puede decir, y lo dices”.
- Señales que avisan: Un día la madre de Sergio (3 años) le estaba regañando, y él le dijo: “Mamá, no cruces los brazos, que te enfadas”.
- ¿Qué es el Horóscopo?: “Te dice si tú eres de enero, tú de febrero. A los que han nacido el mismo mes les pasa lo mismo. Por ejemplo, si hay mucha gente en el cine es porque todo el mundo que ha ido es Leo”.
- Padres-guays: Sonia (4 años), mientras veía la serie Teo observó que el padre de Teo lo llevaba al parque, al zoo, a la playa, a la feria… y entonces ella comentó: “Mira, mamá, qué papá tan bueno que nunca lleva a sus hijos al colegio”.
- ¿Qué es la paz?: “La paz es quererse pero sin besarse en la boca” “La paz se consigue con el amor, con el de dentro, porque el de fuera es un poco guarro”
DISQUISIONES Y PARADOJAS: Reflexiones hondas
- Burócrata en ciernes: David (4 años) mirando al Guernica de Picasso, dijo: “Pero ¿qué desorden es éste?”
- Una de ergonomía funeraria: Unai (9 años) estaba tumbado pensando y les dijo a sus padres: “Cuando uno se muere tiene que tener cuidado de morirse en una buena postura… que es para toda la vida”.
- Superviviente: Javier (5 años) hizo una excursión a las ruinas de una ciudad íbera y, mientras el guía iba explicando cómo vivían y luchaban, el niño lo miro con cara de alucine y le preguntó: “¿Y sólo quedaste tú?”.
- Algo no me cuadra: La madre de Unai (3 años) se estaba duchando y al verle los pechos, le dijo: “Mamá, por ahí bebe la leche Edgar” (su hermano pequeño), le miró la espalda y le preguntó: “Pero, entonces, ¿por dónde te meten a ti la leche?”.
- Lucidez: Eva (8 años) estaba hablando con un amigo y le decía “El mundo, la vida, todo se creó con el Big Bang”, pero su amigo le replicó “No, todo lo creó Dios; la vida vino de Adán y Eva”; entonces Eva le dijo: “Perdona, pero eso es una leyenda urbana”.
TODO ES RELATIVO: Perdona, pero no lo veo como tú…
- Una de Slow Movement: Yago (7 años), estaba tumbado en el sofá y su madre le riñó: “¡Yago, no pierdas el tiempo!”, y él dijo “Mamá, no lo estoy perdiendo, lo estoy disfrutando”.
- Gramática a la carta: Miguel (5 años) contestó gritando a su madre, y ésta le preguntó “¿por qué me gritas de esa manera?” y el niño le respondió: “Mamá, yo no grito, es que pongo la tilde en todas las letras”.
- Sabiduría Open Source: El día que Yamile (6 años) hizo su primer examen, le dijo a su madre que le había ido bien, pero que había una cosa que no sabía y que se lo miró a Marcos. La madre enfadada le dijo: “¡Pero eso es copiar!” y ella le contestó tan tranquila: “No, mamá, sólo miraba lo que no sabía”.
- Empatía inocente: Un día estaba María (5 años) con su madre viendo una peli en casa y salió una escena de sexo. María se quedó muy atenta y dijo: “Jolín, mami, pobrecito, el chico no hace más que empujar y ella no le deja sitio en la cama”.
MISCELANEAS: Cajón de sastre con salero infantil
- Una de Educación Expandida: Luc (6 años) le enseñó a su madre el número diez mil escrito en un papel y empezó a indicarle “Unidad, decena, centena, unidad de millar…” entonces su madre le preguntó “¿Ya has aprendido eso en el Cole?” y Luc le dijo: “No, en el cuponazo de la ONCE de la tele”.
- Niña previsora: Un día Marta (5 años) le preguntó: “Abuela, y tú ¿cuándo te vas a morir?”. “Pues, hija, no lo sé, ¿cómo me preguntas eso?”, le respondió. Y Marta le contestó: “No, por nada, porque quería que vinieras a mi boda”.
- Precoz sindicalista: El padre de Eva (6 años) le preguntó “¿tienes ganas de que empiece el colegio?”, la niña respondió “no”. “¿y por qué?” insistió el padre, y Eva le dijo “Porque nos ponen deberes y luego ni nos pagan ni nada”.
- Una de frikis: Diego (6 años) le preguntó muy preocupado a su padre si en el cielo había comida, si estarían sus juguetes, si haría frío… y ninguna respuesta le satisfacía. Ante tanta insistencia el padre le explicó que “nadie ha vuelto para contárnoslo” y entonces Diego comentó: “Pues, papá, lo podrías buscar en Internet”.
- Sociedad del Bienestar: En una comida de cumpleaños María (6 años) empezó a suspirar y sus padres le preguntaron: “¿qué te pasa?”, y ella contestó con cara de resignación: “Que estoy deseando jubilarme para no tener que ir más al cole”.
- Niña verde: El padre de Candela (6 años) estaba de viaje y ella lo extrañaba. Una mañana al despertar, le dijo a su madre: “Jo, mamá, estar sin papá es peor que el cambio climático”.
- Visionario de la emancipación tardía: Los padres de Mario (6 años) le preguntaron un día “¿qué vas a ser de mayor? ¿Médico, policía..?”. El niño se quedó pensando y respondió: “Creo que voy a ser hijo siempre”.
Ojalá que te hayas reído con este seriado que cuenta historias de estupendos locos bajitos y, como siempre, te espero por aquí para seguir la conversación y el buen rollo 🙂
luis.tic616
¡Qué «jartá» de reir por favor!
Aunque a veces una preguntita de estas te pone en aprietos. Una vez mi hijo, que en aquel momento tenía 5 años, me preguntó, muy serio y solemne: «papa, ¿qué es más importante, los deberes o la vida?» Pasmado me quedé
Gracias Amalio por este buen rato
Amalio
Vaya, Luis, qué gustazo saber que te has «jartao».
Tu hijo sabe tira… colega, seguro que era porque suponía que le responderías «la vida», y entonces se lo ponías a h… pa decirte: «oye, papa, pues mira, esto de no hacer deberes es ‘la vida’ asi que ahí te los dejo» 🙂
Los niños siempre tienen algo en mente (a menudo un «plancito» hecho a su gusto) cuando preguntan algo, y a mi me mola intentar descubrirlos. Cuando le pillas «el plan» se sorprenden que sepamos tanto, y es una buena oportunidad para reirnos juntos. Gracias a tí
arati
Ay sí, se me había pasado la entrada y ni te imaginas lo bien que me han senntado las risas de buena mañana. Geniales
Amalio
Me alegro mucho, Judith, que hayas echado unas risas a costa de estos perlitas de sentido comun 🙂
Joanka
Si es que los niños son unos cracks! Lástima que al crecer perdamos chispa!
Yo tengo recogida en video una respuesta de mi hija, de cuando tenía 2 años y medio, que si te apetece, puedes ver en http://www.youtube.com/watch?v=GsDLIG3vPbA&sns=em
Gracias, Amalio por estas refrescantes entradas!
Un abrazo.
Amalio
Joan: Una alegría verte por aqui. Tenemos que mantener la chispa, o por lo menos, esa chispilla de atrevimiento y pensamiento divergente. Ja, he visto el video de Mar, preciosa la niña, con un salero increible. Lástima que no entienda bien el catalán, y me quede con ganas de saber qué ha respondido tu niña a la pregunta «¿cómo hablas tú?», pero presumo que tan «animal» no te vé 🙂 Un abrazo, colega
Joanka
Hola Amalio,
La pregunta era «com fa el llop?», que viene a ser «¿qué hace el lobo?» y en lugar de la onomatopeya esperada dijo «me voy a comer las cabretas», porque su relación con los lobos no había ido más allá de la presencia de estos en los cuentos…
Un abrazo
Amalio
Ja, que ignorante soy con el catalan, por dios. Yo que pensaba que tu le preguntabas: «¿y cómo hablo yo?» por seguir el juego a lo de los animales, y como no entendía su respuesta, me quede con ganas. Gracias, colega, qué risa lo de las cabretas… en fin, ya sabes, es lo que educan los estereotipos de los cuentos… pero algo en esos años tiene que ser sencillo, no?? un abrazo, y gracias por la aclaración
Juana
Como mola echarse unas risas por la mañana ….
Amalio
Mola, Juana, a que sí? Pues eso, a reirse todo lo que podamos. Un abrazo 🙂
Francesca
Ufff… no sé si me has pillado en uno de esos días en los que uno necesita reírse como sea, pero se me saltan las lágrimas… y además que ahí hay talento, ¡si señor!, destilado y en dosis homeopáticas… Gracias por el buen rato, Amalio. Un beso.
Amalio
Querida Francesca:
Aqui estoy respondiendo algo tarde, pero con el mismo gusto de siempre. Me alegro que te hayas parti’o de la risa, esa era la intención. Mucho talento, muchísimo… tienen estos maravillosos renacuajos 🙂
Gracias a tí