Cómo encuentran la creatividad 15 mujeres de postín

POST Nº 646
La revista femenina The Cut publica una serie especial de artículos sobre la ambición. Se llama “Doing the most”, y en ella incluyen visiones sobre cómo definir la ambición, sus rasgos positivos y negativos, y las distintas maneras de “aprovecharla y conquistarla”. Siempre contados desde la perspectiva de las mujeres, que son las protagonistas de todas las entregas.
En uno de los artículos, Julie Ma hace una selección -tomada de distintas publicaciones- de los rituales que siguen (o han seguido) algunos personajes femeninos famosos para encontrar la creatividad. Varios de ellos me han parecido curiosos o, como mínimo, entretenidos de comentar. Los hábitos son diversos y realmente coloridos. Aquí dejo un resumen, por si te inspira alguno:
Tener un espacio dedicado, de uso único:
Maya Angelou: “Todavía tengo una habitación de hotel en mi ciudad natal y la pago por mes. Voy alrededor de las 6:30 de la mañana. Tengo un dormitorio, con una cama, una mesa y un baño. Tengo el Tesauro de Roget, un diccionario y la Biblia … Tengo todas las pinturas y cualquier decoración sacada de la habitación. Le pido a la gerencia y al servicio de limpieza que no ingresen a la habitación, por si acaso he tirado un papel al piso, no quiero que lo descarten. Aproximadamente cada dos meses recibo una nota debajo de la puerta: ‘Estimada Sra. Angelou, permítanos cambiar la ropa de cama”.
Infusiones y rituales de apoyo:
Marie Kondo: “Bebo varias tazas de té al día. Probablemente tenga alrededor de 15 tipos diferentes de té en mi armario en un momento dado [muy ordenado, añado]. Por lo general, tomo té de hierbas cuando me despierto por la mañana, té verde con el desayuno, té negro por la tarde y té de hierbas nuevamente por la noche”.
El poder de la observación:
Carine Roitfeld: “Solo tengo curiosidad y tengo un buen sentido de la observación. Y puedo transformar inmediatamente esta observación en ideas para la moda. Así es como trabajo siempre. No voy a libros, no voy a hacer referencia a una tienda vintage. No voy al pasado. Lo que más me inspira es lo que sucede a mi alrededor”.
Grace Coddington: “Me encanta ir en metro por la mañana. Hay tanta gente maravillosa en el metro. A menudo me entristece vivir solo a tres paradas de la oficina en Times Square, porque normalmente estoy averiguando quién es ese loco de la esquina cuando tengo que bajarme”.
Judy Blume: “Observar. Hacer anotaciones. Escuchar cuidadosamente. Escuchar cómo las personas se hablan entre sí. Un buen escritor siempre es un observador de personas”.
Cazar los momentos mágicos:
Taylor Swift: “Gran parte de la composición son cosas que aprendes. Estructuras y cultivas esa habilidad, y sabes cómo crear una canción. Pero hay momentos místicos, mágicos, momentos inexplicables en los que una idea que está completamente formada simplemente aparece en tu cabeza. Y esa es la parte más pura de mi trabajo”.
Hacer retiros:
Jenny Han: “Todavía hago mis retiros de escritura, que he estado haciendo durante toda mi carrera como escritora. Alquilo una casa y reúno a un grupo de amigos escritores y me voy a trabajar”.
Centrarse en temas significativos:
Whitney Wolfe Herd: “Realmente trato de hacerme la pregunta del nueve: ¿Importará esto en nueve minutos, nueve horas, nueve días, nueve semanas, nueve meses o nueve años? Si realmente importa a todos los niveles, entonces le presto atención”.
Juntarse con gente que inspire:
Amy Poehler: “Encuentra un grupo de personas que te desafíen e inspiren, pasa mucho tiempo con ellos y cambiará tu vida”.
El orden importa:
Erykah Badu: “La música es lo que me saca. Nunca he escrito letras sin música, eso sería poesía. Es la música primero, luego tarareo de una manera rítmica y sincopada. La siguiente parte es escucharlo y decodificar lo que digo”.
Extraer patrones:
Kate McKinnon: “Yo, sola en mi oficina, respondiendo a los videos de YouTube. Me gusta idear axiomas y notar patrones de lo que funciona y lo que no, para poder codificarlos en pequeñas reglas que pueda usar”.
Madrugar:
Toni Morrison: “Siempre me levanto y preparo una taza de café cuando todavía está oscuro – debe estar oscuro – y luego bebo el café y veo la luz llegar … Todos los escritores idean formas de acercarse a ese lugar donde esperan hacen el contacto, donde se convierten en el conducto, o donde se involucran en este misterioso proceso. Para mí, la luz es la señal en la transición. No está en la luz, está ahí antes de que llegue”.
Llevar cuadernos:
Judy Blume: “Llevo un cuaderno y apunto todo lo que me viene a la mente sobre personajes y lugares y cualquier otra cosa. Ese cuaderno es mi manta de seguridad. De esa forma nunca me siento solo con una página en blanco o una pantalla en blanco”.
Prepararse bien, estudiar a fondo el reto:
Annie Leibovitz: “Hago mi tarea. Cuando me preparaba para fotografiar a Carla Bruni, la esposa de Nicolas Sarkozy, el presidente de Francia, en el Palacio del Elíseo, miré fotos del palacio. Miré fotografías de otras personas que habían vivido en el palacio. Fotos de parejas enamoradas. Fotos que otros fotógrafos habían tomado de Bruni (…) Sabía que ella era un músico popular así que también escuché su música”.
Pensar lento, ejecutar rápido:
Shonda Rhimes: “Nunca pongo la pluma en el papel para escribir el guión o el libro ni nada hasta que realmente sé lo que voy a escribir. Y luego la escritura es rápida: a veces puede llevarme un año pensando, y luego puedo escribir un guión en tres días (…) Nunca, me tomó seis meses escribir este guión, o me tomó seis meses escribir este libro» (…) Todo está sucediendo dentro de mi cerebro”.
Ejecutar rápido en intensivos concentrados:
Elizabeth Gilbert: “Mi vida se divide en momentos en los que estoy escribiendo activamente un libro y momentos en los que no. Solo estoy escribiendo activamente un libro una vez cada tres o cuatro años, y cuando lo hago, mi día es muy simple. Me levanto a las 4:30 o 5 am y escribo sin parar hasta media mañana. Luego me paso el resto del día mirando una pared porque mi cerebro es como un huevo frito. Cenaré temprano y me acostaré temprano, a las 7 u 8 pm, y lo volveré a hacer al día siguiente y al siguiente hasta que el libro esté terminado”.
NOTA: La imagen es del álbum de Picjumbo en Pixabay.com. Si te ha gustado el post, puedes suscribirte para recibir en tu buzón las siguientes entradas de este blog. Para eso solo tienes que introducir tu dirección de correo electrónico en el recuadro de suscríbete a este blog” que aparece en la columna derecha de esta página. También puedes seguirme por Twitter o visitar mi otro blog: Blog de Inteligencia Colectiva
Juanjo Brizuela
Lo que son las «rutinas creativas», ¿verdad?
Estaría bien tener más de estas cosas: lo importante. Cada cual tiene y se encuentra cómodo en su misma rutina. Curiosa palabra unida a otra: rutina y creatividad.
Me parece curioso.
Pero me encanta todo ello.
Amalio Rey
Sip, Juanjo, es una combinación que plantea la paradoja de que la energía creativa funciona mejor si se canaliza dentro de un sistema. La improvisación, sin rituales, ni rutinas, suele llevar a «entropía creativa», que desgasta mucho. Siempre intentamos crear «estructura». Un abrazo
BARTOLOME ZUZAMA BISQUERRA
Muy buena recopilación y muy interesante, Amalio, un placer leerlo.
Amalio Rey
Hola, Bartolomé. Me alegro verte por aquí. Como verás, ya edité y resolví el error que tuviste de teclado 🙂 un abrazo
Julen
Muy interesante esta recopilación. Refleja la diversidad de personas que pisamos este planeta. Uno puede sentirse reflejado en varias de las propuestas. Sí, sí, muy interesante.
Amalio Rey
Gracias, Julen. Seguimos!!