1.5 vs. 2.0: reflexiones a partir de un video (post-91)
Hace poco me entró un post de Julen Iturbe con el video del seminario sobre Empresa Abierta que compartió hace más de un mes con Genis Roca en la EOI, moderado por Tiscar Lara.
Lo primero que quiero es recomendarte que veas el video. Es un poco largo, dura más de una hora y media, pero vale la pena. Además, las intervenciones son pausadas, así que te da tiempo a tomar apuntes y a reflexionar, como si estuvieras ahí presente.
He seguido de cerca la trayectoria de Julen y de Genis, como dos “pesos pesados” que se han ganado a pulso el prestigio que tienen en esto del dospuntocerismo o como se quiera llamar. Conozco personalmente al primero, con el que compartí unas jornadas de Canarias, pero no he tenido el placer de desvirtualizar al segundo aunque hemos quedado para vernos muy pronto.
Ambos hablan desde la experiencia, porque tienen un demostrable rodaje en esto de la consultoría 2.0, que se complementa con mucha teoría y chicha de fondo. Encima, son estupendos comunicadores porque conversan, no dan discursos, y eso se agradece.
Cuando vi el cartel, dejé todo lo que estaba haciendo, y “asistí” al seminario como el más inquieto de los participantes. Puse atención en lo que decían, pero también en lo que no, porque Julen y Genis suponen una combinación singular. Sus trayectorias y puntos de vista marcan algunas diferencias y complementariedades.
Lo que voy a contar es una lectura personal. Es lo que percibo y nada más. No tiene por qué coincidir con lo que tu aprecias en el video, ni siquiera con lo que Julen y Genis pretendían (no) decir. Solo pretendo compartir mis impresiones que, por definición, son mías… valga la redundancia.
Pues bien, a lo que iba. Julen y Genis tienen muchas coincidencias. Los une sobre todo la honestidad intelectual, su deseo compartido de impulsar modelos participativos y abiertos, y su confianza genuina en el valor de las redes, además del respeto que se profesan.
Pero también percibo significativas diferencias en sus percepciones sobre lo 2.0. Es más, me atrevería a aventurar que son (casi) dos “escuelas” distintas, aunque complementarias. Esto lo venía rumiando hace tiempo, pero este vídeo me ha servido para constatarlo aún más.
En esa línea, hace poco leí un interesante post de Aitor Abediaga: “La empresa de siempre, la empresa abierta”. Pasión por Innovar en el que Aitor decía que la perspectiva de Genis “no difería en gran parte” de la de OBEA, el grupo de investigación de Julen, y que ambos discursos de complementaban a la perfección. Yo creo que difieren pero, efectivamente, se complementan, y eso es lo importante.
Por cierto, no importa en absoluto que se llamen Julen y Genis. Olvidémonos de los nombres, y centrémonos en las ideas, para ahondar en la hipótesis de que hay paradigmas alternativos (o si se prefiere, complementarios) a la hora de implantar lo 2.0 en las empresas.
Como consultor he bebido de las dos “escuelas”, y confieso que tengo todavía más preguntas que respuestas, aunque poco a poco voy desbrozando el camino para encontrar la mía.
Antes comentaba que me había fijado en lo que decían, pero también en los silencios. El debate ha sido elegante y contenido, jugando a la convergencia porque hay una evidente admiración mutua, pero en varios puntos hubiera deseado que fluyera más el desencuentro o la divergencia para que estos genios pudieran redondear la reflexión hurgando con más intensidad en sus argumentos.
Insisto en las diferencias porque es ahí donde vamos a encontrar lo verdaderamente interesante. Las coincidencias más o menos las sabemos, pero es en las divergencias donde se plantean los dilemas prácticos que a mí, como consultor, más me preocupan.
Yendo al grano, intentaré explicar mi hipótesis de las dos “escuelas”. No es un tema nuevo, se viene discutiendo hace mucho de esto. Para no personalizar el asunto, voy a renombrar las dos propuestas en términos más genéricos.
La postura que se me parece más a la de Genis la llamare “1.5”, mientras que a su enfoque complementario, el que (opino yo que) propone Julen en su esencia, será la “2.0”. Lo siento, sé que no estoy siendo muy original con las etiquetas.
A ver, antes de seguir y a riesgo de ser pesado, quiero reiterarme en la misma idea de no personalizar. Me estoy inspirando en esta puesta en escena de dos artistas, como dice Julen en su post, para dibujar dos arquetipos que pueden no corresponderse exactamente con las ideas/personas que me han servido de referencia. Quiero hablar de modelos y no de personas.
Por empezar diré que las dos escuelas pretenden cambiar cosas, no son conformistas, pero una trata el problema de un modo más hondo y sistémico, y esto la lleva necesariamente a ser más ambiciosa con el cambio.
El abordaje 1.5 es más “reformista”, el 2.0 más “revolucionario”, pero no sé bien cuál de los dos llegará más lejos en términos de cambiar la realidad. Es una de mis dudas.
Sería equivocado suponer que Julen no es realista, ni que Genis se conforme con cambios superficiales. Ambos son consultores con rodaje y comparten ambiciones pero siguiendo estrategias diferentes. El destino que persiguen es posible que se parezca (o lo mismo no) pero el itinerario es diferente. Así lo veo yo, pero puedo estar equivocado.
Podría decir, también, que Genis busca “lo posible” mientras que Julen “lo deseable”, pero tampoco quiero que esto se interprete en términos equivocados porque no es tan simple como eso.
Genis lo decía: explicar la necesidad del cambio no es lo más difícil. Cada vez es posible explicarlo mejor, y con la crisis la gente está más receptiva. El problema está en el cómo.
Y ahí es donde, como era de esperar, veo las mayores diferencias entre ambos enfoques, y que resumo en estos 5 puntos:
- Territorios de trabajo y foco del cambio
- Cambio-solo-viable-desde-arriba vs. Cambio-viable-también-desde-abajo
- Replanteamiento profundo del contexto vs. foco-micro en la empresa
- Filosofía y principios (procesos) vs. Herramientas (resultados)
- Importancia y tipos de indicadores para medir los avances
Por razones de extensión, estos cinco puntos los iré tratando, por separado, en los siguientes posts que voy a publicar y que conforman en conjunto una trilogía.
Antes de terminar, me gustaría rescatar ese contrapunto de humor inteligente que usó Genis en el video cuando dijo que él hacía de catalán con la misma eficacia que Julen de vasco. Estereotipos aparte, creo que es una buena manera de parodiar, con gracia, las dos posturas del debate.
Por último, y antes de enlazar con el siguiente post, me voy a permitir usar la misma frase que se dedicó en su día (y con merecimiento) a Dolors Dreig: si no hubiera Genis y Julen, habría que inventarlos. ¡¡Gracias, maestros!!
Oier
Acabo de ver el video, aprovechando una tarde tranquila.
El debate entre si comenzar a introducir el cambio por iniciativa de los de arriba o de los de abajo, en el que Genís y Julen se inclinan también cada uno para un lado, es similar a cuando se hable de lo 2.0 en términos de tecnología o de personas:
Los de arriba serían como la tecnología, esa componente imprescindible pero que rara vez puede ser la clave del cambio y el verdadero valor. Y los de abajo, los que realmente representan el cambio social en la operativa del día a día e impregnan a los de alrededor. Ambas componentes son necesarias, pero una es determinante.
En mi opinión, principalmente porque no hay nada más motivador que el encontrar una oportunidad de mejora y tratar de llevarla adelante. Eso es mucho más difícil cuando el impulso es de otro y nos llega la obligación de acatarlo o fortalecerlo, con la excepción de que quien nos lo plantea sea visto no como un jefe sino como un líder (algo muy poco habitual en general). Lo que está claro es que la infantería es clave porque en último término todo salto adelante debe reflejarse en lo cotidiano más allá de los planes estratégicos, y si la idea ha nacido dentro la motivción por defenderla puede resultar determinante.
Amalio
Miquel:
Gracias por intentarlo de nuevo, no queria que se extraviara tu comentario, que siempre aporta perspectivas interesantes.
En lo del espiritu de reforma vs. revolucion estamos de acuerdo. ¿como se llegara mas lejos? Pues ahí no lo tengo tan claro…
En relación con los indicadores, coincido contigo en la utilidad de “operacionalizar” las cosas con indicadores, y en que hay que usarlos con “acierto, sobriedad e inaginación”, pero difiero en lo siguiente: ¡¡sí que creo que hay “indicadores 2.0”!!
Si hay “objetivos 2.0”, que los hay (si no, no nos plantearamos estos cambios), ¡¡tambien tienen que haber indicadores “imaginativos” que los midan, aunque sin obsesión!!.
Es mas, te invito a pensar en esto, tú que eres tan bueno soñando-con-la-razon. Es un buen asunto para someterlo a la reflexión colectiva: ¿existen indicadores 2.0? ¿hay indicadores que nos ayuden a medir “el proceso” hacia lo 2.0, y tambien “los resultados”?
Creo que es algo en lo que tenemos que pensar…
mkl
Pues vaya, comenté y no dejé rastro… cosas de lo digital. A ver, te decía que estaba muy de acuerdo contigo y que pensaba que la perspectiva 2.0 (Julen) estaba más por lo global y no tanto por lo intra-empresa, por la refundación más que por el cambio, mientras que la 1,5 (Genís) Estaba en la estrategia de la reforma. Parece que coincides a la vista de los posts siguientes.
Otro comentario que te dejé y se desvaneció, fue con respecto al tema de los indicadores. Pienso que no son un tema que se vea condicionado por la estrategia 1, 1.5 o 2. Soy un consultor que siempre trata de operativizar y medir, sin caer en excesos y considero a los indicadores una herramienta que puede ser buena cuando e usan con acierto, sobriedad e imaginación o una pesadilla inútil cuando son el centro de la gestión, se construyen mal y sin ingenio; pero no creo que haya indicadores singulares para lo 2.0, sólo requieren de más imaginación.
Y ya está. Disculpa que concentre los dos comentarios en uno, pero así aseguro una sola vez que se publiquen.
Y felicidades por el curro, que vale la pena leerlo.
Hasta pronto (y ahora le doy a submit y que sea lo que la diosa quiera 😉 )
Amalio
Dolors:
Ya me diras cuando veas el video. Cada uno puede ver cosas distintas y complementarias. Eso es lo bueno. Estos dos artistas dan mucho juego para pensar, la verdad…
Perdona, es cierto, suelo confundirme con tu nombre, porque veo tu nick “Dreig” y por eso me confundo… Vale, prometo no hacerlo mas…una vez aclarado…jjjj
Por cierto, este debate entre lo 1.5 y lo 2.0 lo has manejado mucho tú en tu blog (a veces, mas indirectamente, sin nombrarlo asi), y esas reflexiones me han inspirado bastante.
Gracias por pasarte por aqui, siempre eres bienvenida…
dreig
Interesante entrada, Amalio. Habrá que ver el vídeo con calma….
Conversadores de los que aprender, sin duda…
Un apunte: Dolors Reig, que lo de dreig era compuesto 🙂 Yo diría que si no existiera la web social, habría que inventarla. Pero un momento…¿no es eso lo que vamos haciendo? 🙂
Gracias por ello.
Un abrazo
dreig
Interesante entrada, Amalio. Habrá que ver el vídeo con calma….
Conversadores de los que aprender, sin duda…
Un apunte: Dolors Reig, que lo de dreig era compuesto 🙂
Un abrazo