Amalio Rey | Blog de innovación con una mirada humanista

  • Inicio
  • Publicaciones
  • Proyectos
  • Testimonios
  • Archivo
  • Contacto
  • Sobre mi
Suscríbete a este blog

Subscríbete y recibe las novedades en tu e-mail:



Blog de inteligencia colecitva

Amalio Rey

Escribo para comprender

  • Inicio
  • Publicaciones
  • Proyectos
  • Testimonios
  • Archivo
  • Contacto
  • Sobre mi
  • Home
  • /
  • Consultoría
  • /
  • Educación
  • /
  • Offtopic
  • /
  • Política
  • /
  • Paternalismo (post-293)
Consultoría, Educación, Offtopic, Política

Paternalismo (post-293)

por Amalio Rey 08/04/2012

He tenido últimamente una curiosa coincidencia de “sucesos paternalistas”, así que me apetece escribir hoy del tema. Supongo que te suena.

Hablo de sombras alargadas, que no delegan, que dan consejos invasivos e incluso cuando no les invitan. Pero que conste, lo hacen siempre de buena intención. Una actitud que solo se entiende como negativa cuando se está del otro lado, del que la sufre.

El paternalismo es uno de los comportamientos más difíciles de reconocer y de corregir, y afecta ámbitos tan dispares como la familia, la amistad, la pareja e incluso, la política. Se mueve por territorios ambiguos, entre el afecto, la protección y el abuso de poder; y por eso cuesta tanto fijar lindes entre lo que legitiman los sentimientos y lo que significa una intromisión en la libertad y responsabilidad del otro.

Según la Wikipedia, el paternalismo es “una modalidad del autoritarismo, en la que una persona ejerce el poder sobre otra combinando decisiones arbitrarias e inapelables, con elementos sentimentales y concesiones graciosas”. Mientras que la RAE lo define así: “Tendencia a aplicar las formas de autoridad y protección propias del padre en la familia tradicional a relaciones sociales de otro tipo: políticas, laborales, etc.”

Lo cierto es que estamos rodeados de paternalismo, y allí intercambiamos roles de víctimas y victimarios. Los sentimientos y la necesidad de protección de aquellos que queremos nos juegan a menudo una mala pasada. Cuesta encontrar el equilibrio entre ayudar e incapacitar, entre colaborar y suplantar.

¿Cuántas veces nos hemos visto suplantando la iniciativa del otro, anulando su derecho a pensar y decidir por su cuenta, bajo el convencimiento de que lo estamos ayudando? En la educación familiar es pan de cada día, en la empresa lo vemos de forma sistemática en estilos autoritarios de algunos directivos, y en la política ya sabemos la rotundidad con que nuestros “representantes” dan por hecho lo que nos viene bien a nosotros, en teoría los “representados”.

Lo realmente complejo del paternalismo es esa parte “sentimental” que invoca. No es el malo que viene a quitarnos cosas para hacernos daño, porque entonces sería más sencillo; sino el bueno que lo hace “porque desea lo mejor para nosotros”, así que es fácil dejarse marear por tan buenas intenciones.

Los paternalistas se mueven en un registro amplio, lleno de matices. Los hay más tolerantes y abiertos, que todavía no han perdido la capacidad de empatía para darse cuenta cuando la están cagando; pero también los que están tan convencidos de su inteligencia visionaria que convierten los consejos en intromisión mezquina y humillante. Esto último entra dentro de lo que yo llamo “paternalismo arrogante”, un hábito más frecuente de lo que parece.

#Yoconfieso que he caído en ese error, pero espero haberme dado cuenta a tiempo. Creer que uno sabe lo que es bueno para los demás equivale a pensar que ellos son incapaces de saber lo que es bueno para ellos.

Desde una perspectiva positiva, creo que esto nos ocurre la mayoría de las veces por falta de paciencia. Ya lo contaba en un post anterior. No tenemos paciencia para dejar que la gente aprenda haciendo, y decidiendo por su cuenta. No les damos tiempo a que experimenten, e intervenimos tan pronto nos parece que la cosa no marcha como esperamos.

El paternalismo en las organizaciones tiene un impacto crítico en la asunción de responsabilidades. Si hay algún superdotado al final de la cadena vigilando la calidad, y decidiendo qué está bien, y qué está mal, la gente se termina relajando. No es el camino para que aprendan, y crezcan, por cabeza propia.

Hace poco me ocurrió algo parecido que me hizo espabilar sobre mi forma de gestionar ciertos temas, y he aprendido con ello. No pienso cometer otra vez el mismo error. Por eso me apetecía contarlo, así que ya sabes, estate alerta porque el camino al infierno está empedrado de buenas intenciones.

Suscríbete a este blog

Recibe las novedades en tu e-mail:



8 Tags: consultoria, familia, gestion de personas, liderazgo, paciencia, paternalismo, paternalista, política, portada, RRHH

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.


8 Comments

  1. Reply
    Suricato
    26/12/2016 14:02

    A natureza tem horror ao vácuo, os humanos à verdade. Entre elas – das verdades – aquela que o homem só amadurece na luta da iniciativa privada, faz com que a maioria inconscientemente apegue ao lado paternalístico da vida, principalmente o político ou público “estabilizado”…

  2. Reply
    Emilio
    11/04/2012 01:36

    Buen post Amalio, enganchado desde el principio! Yo siempre digo q mi derecho asertivo favorito pero el mas difícil de cumplir es el «Derecho a no seguir los consejos que me den»… La parte difícil es entenderlo en la piel del otro.

    Un saludo!!

    • Reply
      Amalio
      14/04/2012 22:12

      Gracias, Emilio. Me gusta tu derecho, lo difícil a veces (como muchos «derechos») es hacerlos valer, no?
      Un saludo

  3. Reply
    Paz Domínguez Ara
    09/04/2012 11:29

    Muy bien explicado Amalio. Hay que estar siempre alerta, tanto de los «paternalismos» que nos atacan desde fuera, como de los que acechan internamente.

    “encontrar el equilibrio entre ayudar e incapacitar, entre colaborar y suplantar” es un reto diario para mi tanto en mi vida personal como en la profesional.

    La buena noticia es que la práctica diaria hace que te salten con más facilidad las alarmas.

    Un libro excepcional y durísimo que leí hace mucho y que voy releyendo de vez en cuando es «Por tu propio bien» de Alice Miller. No habla en particular de paternalismo, pero da muchas pistas.

    Yo por si acaso, cada vez que oigo «te lo digo por tu propio bien»… o similares aprieto a correr con fuerza 🙂

    Un placer leerte.

    Paz

    • Reply
      Amalio
      10/04/2012 10:24

      Gracias, Paz. Efectivamente, es un reto diario en los dos sentidos.
      Comparto tu buena noticia, porque «el cambio se hace camino al andar». Vamos aprendiendo poco a poco a «dejarlos crecer».
      No conocía ese libro que comentas, así que le voy a echar un ojo, que pinta bien.
      Pos’si, esa frase es un clásico, un WARNING para ponerse el chaleco antibalas… 🙂
      Un placer tenerte por aqui…
      bss

  4. Reply
    [cumClavis]
    08/04/2012 15:56

    Muy bueno el post Amalio, bueno y bien escrito. Muy cierto este paternalismo perverso que denuncias y del que nos adviertes…cierto y peligroso. No sabría que rescatar de todo lo que dices… quizás aquello de “encontrar el equilibrio entre ayudar e incapacitar, entre colaborar y suplantar”. Ahí hay tengo yo también un reto.

    Pues eso, que me ha gustado, un abrazo.

    • Reply
      Amalio
      09/04/2012 07:58

      Gracias, Manel. Como siempre, me alegra verte por aquí.
      Estamos todos «retados» con esto, seguro que tenemos mucho que aprender todavía.
      Un abrazo 🙂

  5. Pingbacks/Trackbacks: Bitacoras.com
Post anterior

¿Sólo trabajando levantaremos a España? (post-292)

abril 1, 2012
Siguiente post

Volviendo al MIT en primavera (post-295)

abril 17, 2012

Quizás también te interese

Nelson Mandela
Innovación personal, Innovación Social, Lecturas, Liderazgo, Paradojas, Pensar bien, Política

Descubriendo al Mandela más íntimo

31/01/202131/01/2021
citas
Bienestar, Lecturas, Offtopic, Paradojas, Política

Saramago, el portugués que hablaba claro

23/01/202123/01/2021
Bienestar, Innovación, Tendencias

Servicios antiestrés y compensaciones en dinero como un síntoma

21/06/202021/06/2020
Sobre mi
Author Picture:
AMALIO REY

Escribo para comprender. Me dedico a facilitar procesos de innovación que aprovechen la inteligencia colectiva. Aquí hablo de diseño, estrategia, arquitecturas participativas, consultoría, innovación social y tendencias en la red.

Leer más
Suscríbete a este blog

Suscríbete y recibe las novedades en tu e-mail:



  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
  • Linkedin
Blog de inteligencia colecitva
Miniposts de Amalio Rey

Ruben Blades en Harvard

Colectivos vs. Expertos: una metáfora

Siguiendo al líder...

El olor, como señal

Paul Auster, sobre la educación

Buscador

Introduce el término de búsqueda y pulsa “Enter” para mostrar los resultados

Categorías
  • Bienestar
  • Blogging
  • Consultoría
  • Diseño
  • Educación
  • Estrategia
  • Innovación
  • Innovación personal
  • Innovación pública
  • Innovación Social
  • Inteligencia Colectiva
  • Lecturas
  • Liderazgo
  • Marketing
  • Offtopic
  • Paradojas
  • Pensar bien
  • Política
  • Salud
  • Social Media
  • Tendencias
  • Uncategorized
Facebook Twitter Instagram Flickr Linkedin

Los contenidos de este blog están bajo una licencia: Reconocimiento - Compartir Igual (by-sa)


Introduce el término de búsqueda y pulsa “Enter” para mostrar los resultados