Los caminos de deseo, o cuando la gente vota con sus pies
Los «caminos de deseo» son esos senderos informales que, desbrozados por la hierba, la gente crea como alternativa a las rutas establecidas. Tienen una dimensión colectiva porque son una forma de mapear el comportamiento grupal, haciendo visible una voluntad compartida de divergencia o de creación de soluciones al margen de lo oficial.