Cambridge para nostálgicos (post-409)
Acabo de aterrizar en Boston hace unas horas. Menuda cola, como siempre, en frontera. Estaré en USA diez días. Me quedo en una casa que reservé por airbnb porque el precio de los hoteles en Cambridge está imposible. Mi casero, John, es tan buen tío como parecía en la web, y el sitio es muy agradable, en Somerville, un barrio contiguo a Cambridge desde donde se puede ir caminando al MIT y a Harvard. Como ventaja añadida, estoy junto al campus de la Tufts University y su famosa Fletcher School of Law and Diplomacy, entre las más antiguas de los Estados Unidos. Por ahí el menda se dará una vuelta ahora aprovechando el preceptivo #running que va a tocar por el campus 🙂 (ya avisé que esto iba de nostálgicos… universitarios).
La salida de Málaga esta mañana fue bastante errática, incluido batacazo con el coche porque choqué en un atasco cuando iba al aeropuerto. Nada grave, culpa mía, así que tocará pasar por caja y soltar unos cuantos euros al taller. Para colmo, descubro después que olvidé las gafas en casa, así que a ver cómo descanso la vista de las lentillas estos diez días. Toco madera 🙁
Vengo a Boston, sobre todo, a buscar inspiración para avanzar con mi libro. Más en detalle, me trae aquí tres motivos:
- Participar en la Collective Intelligence Conference 2014 que se va a celebrar del 10 al 12 de junio en el MIT (ya vine a la edición anterior de 2012).
- Echar unas horas en bibliotecas de Harvard y el MIT, y curiosear por librerías de Cambridge en búsqueda de libros y artículos que necesito.
- Visitar dos centros de innovación y emprendimiento vinculados al MIT y a Harvard (el CIC: Cambridge Innovation Center y el i-Lab: Harvard Innovation Lab).
Como la cabra siempre tira para el monte, y yo debo estar un poco pirado (que también), confieso que trabajar en bibliotecas de Harvard y el MIT es de las cosas que más me ilusionan del viaje. Me he organizado bien para poder hacerlo. En viajes anteriores a Boston no había podido conocer la mítica Widener Library, que es la principal de Harvard y la biblioteca universitaria más grande del mundo (trabajan en ella más de 1300 personas). La entrada es restringida y se requieren unos trámites formales para conseguir el acceso. Pues nada, esta vez he hecho los deberes (con la imprescindible ayuda de mi querida @guambiana) para conseguir el “Independent Research Not Affiliated Pass” que me va a permitir acceder por fin a la Widener. Tengo previstas dos sesiones más en bibliotecas: una en la Baker Library, que es la de Harvard Business School (en esta me va a tocar pagar por un día de acceso a sus fondos) y la MIT Dewey Library, especializada en Management & Social Science, de acceso más abierto.
El vicio es el vicio, así que (cómo no) también me haré un tour por librerías, que Cambridge tiene al menos tres de visita obligada: The COOP (Harvard Cooperative Society) en Harvard Square, Harvard Book Store en Massachusetts Ave. y la pequeña pero finísima librería de MIT University Press en Main Street. Las dos primeras tienen horarios super flexibles, y suelen cerrar a las 10-11 de la noche, así que dan mucho juego para fisgonear en los tiempos muertos.
Sé muy bien que gran parte de la pesquisa bibliográfica que voy a hacer aquí, motivada sobre todo por el libro que estoy escribiendo de Inteligencia Colectiva, se puede hacer perfectamente a través de los catálogos online que tienen esas bibliotecas. También que casi cualquier libro se puede comprar ya por tiendas como Amazon sin moverse de casa. Así que, para ser franco, todo este storytelling es en el fondo un pretexto bien urdido para escapar de mi entorno habitual y buscar inspiración en sitios donde sé que puedo encontrarla.
Está claro que, sin desmerecer, no es lo mismo sentarse a pensar y a explorar posibilidades en un despacho del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) o en la Biblioteca Provincial de Málaga, que hacerlo en sitios como estos con tanta solera, celosamente preparados para despertar esos instintos y con unos fondos bibliográficos que son la repera. No es lo mismo ni de coña, y sé de sobra lo que han significado para mí ese tipo de “migraciones creativas”, siempre amortizadas con creces en lo profesional. Así que… lo que funciona, por qué cambiarlo 🙂
La Collective Intelligence Conference 2014 es el plato fuerte del viaje. Será del 10 al 12 en el MIT Stata Center, un “must” arquitectónico que diseñó Frank Gehry con financiación de Bill y Melinda Gates. El edificio merece verse, sin dudas, porque es super-atrevido. Sobre la Conferencia no me enrollo mucho porque de eso voy a escribir bastante a partir de la semana que viene. Prometo que habrá varios posts, sobre todo en mi otro blog, dedicado sólo a la Inteligencia Colectiva. Pero por hacer boca, diré que los organizadores han montado una agenda con temas muy interesantes y un cartel de ponentes de muchísimo nivel (aquí tienes el programa). Fiel al espíritu de la Conferencia anterior (ver posts sobre la ci2012), será una mezcla interdisciplinar de perspectivas variadas sobre la Inteligencia Colectiva, que van desde la Biología a la Computación Humana, pasando por el Diseño Organizacional y la Innovación Abierta.
Como aspecto singular de esta edición, y que me tiene bastante entusiasmado, va a haber una sesión plenaria dedicada en su totalidad al “Collective Governance” o “Democracia Participativa” como manifestación de la inteligencia colectiva, que contará con cuatro ponentes de lujo: Henry Farrell (autor de “Cognitive Democracy”), Karim Lakhani (experto de Harvard en sistemas de innovación distribuidos), Beth Noveck (directora de The Governance Lab) y la gran Helene Landemore, brillante analista de los posibles escenarios de la democracia post-representativa, y autora de un peazo de libro: “Democratic Reason: Politics, Collective Intelligence, and the Rule of the Many”.
Boston, la ciudad, también tiene lo suyo y se merece al menos un garbeo de fin de semana. El Museum of Fine Arts (MFA) cae seguro (pienso ir el sábado). También algún paseo por Newbury Street, el Boston Waterfront y terminar en el ICA-Institute of Contemporary Arts. Le he echado el ojo a tres galerías fotográficas de la ciudad que tienen una pinta estupenda: Iris Gallery of Fine Photography, Robert Klein Gallery y Panopticon Gallery. No sé si voy a tener tiempo, pero lo voy a intentar, porque últimamente ando muy enganchado con el mundo de la fotografía. Y para poner la guinda, estoy casi decidido a ir a ver un partido de beisbol en Fenway Park, el fantástico estadio de los “Red Fox”, que juegan el 12 y 13 con los “Indians”. Además de que dicen que es un gran espectáculo, desde que vivía en Cuba siempre quise ver un partido de las Grandes Ligas, así que esta puede ser mi gran oportunidad. Claro, si me aguanta el body de tanta movida y llego entero a los últimos días 🙂
Pues nada, ya iré contando. Sed buenos o malos, según os pida el cuerpo; y espero que tengáis suficiente paciencia para sobrevivir estos días al bodrio/paripé inter-monárquico de Felipito VI y el Mata-Elefantes. Que les den. A mí que me dejen con mi nostalgia universitaria (o republicana, que también).
Nadir Chacín
¡Me encantas! ¡La próxima usa couchsurfing para viajar! jejeje Pásatelo en grande, chévere pues. Espero ese libro tuyo que ya suena muy bien y los posts del Congreso.
Abrazos
Amalio Rey
Gracias, Nadir. A mí me encanta verte por aquí, y por FBK. Me agradan estas conexiones. Airbnb me va mejor. Prefiero una cama que un sofa, mientras pueda pagarlo. Un abrazo 🙂
Alfonso Romay
Por cierto, tengo pendiente comentar en tu post sobre complejidad, buffers e identidades. Está muy en la línea de lo que vengo trabajando, así que te contactaré para compartir info.
Amalio Rey
Muy bien, Alfonso. Echo en falta que la gente comente más. Es lo que más valoro de un blog, que la gente converse. Ultimamente los comentarios han bajado mucho. Quizás los contenidos invitan menos a charlar que antes, no lo sé. Pero es algo que me gustaría mejorar. Saludame a tus estorninos…. 🙂
Alfonso Romay
Disfruta mucho la estancia y cuéntanos todo en los dos blogs. Como dice Julen, seguro que lo agradecemos mucho los que te leemos.
Estaremos esperando tus crónicas en forma de posts «nostálgicos». 🙂
Amalio Rey
Perfecto, Alfonso. Como le comentaba a Julen, estoy ahora metabolizando el montón de información que he recogido. No es fácil. Estoy con «information overload», tratando de ponerle orden. Pronto arranco con las crónicas. Un abrazo fuerte 🙂
Julen
Sueno todo divino 🙂
Me alegro mucho de que te animes a todo este trajín. Quienes te leemos te lo agradeceremos, seguro. Espero que disfrutes mucho por ahí.
Amalio Rey
Gracias, Julen. Esto es divertido, y me lo paso bien, que es lo importante. Ahora tengo tanto material, que no sé ni por donde empezar a escribir. A ver cómo encajo todo. Un abrazo 🙂