Redes [no] empresas y sentido de pertenencia (post-160)
Acabo de publicar esta semana un artículo de 3 folios en el último boletín emotools, contribuyendo al interesante debate que venimos teniendo en la #redca sobre alternativas a la empresa.
No quiero perder la oportunidad de invitar a quienes pasan por este blog a incorporarse a la reflexión que estamos haciendo, y por eso escribo esta entrada para reseñar el artículo que te invito a leer.
Yo mismo me veo en un proceso de revisión de conceptos y escenarios a la luz de lo que voy descubriendo. Pensar y compartir me hace bien, y tu opinión cuenta.
El asunto es complejo y de suma importancia. Mejorar nuestro entendimiento sobre cómo articular redes productivas y estables que funcionen tiene un significado vital para mucha gente que se siente incómoda, e incluso amargada, en ese polémico contenedor que llamamos “empresa”.
El artículo al que hago referencia es un análisis de cómo veo (por el momento) el tema, lo que saco en claro de mi experiencia como en-redado y de escuchar con atención distintas posturas. Me estoy moviendo y eso me gusta. Hoy no pienso igual que hace un año, aunque sigo teniendo hambre de argumentos porque todavía quedan muchos rincones oscuros por iluminar, grandes preguntas sin respuesta.
La historia de este artículo empezó con un post de Nacho que dibujaba una empresa de consultores diferente a la que estamos acostumbrados, y que sintonizaba bastante con mi empresa ideal, al que le siguió Odilas con su “imagina una [no] empresa de consultores”, en el que proponía a las redes como una alternativa a la empresa.
María Jesús nos invitaba a que hablemos de redes “productivas” y “estables”, y no de meros constructos para colaboraciones puntuales y aisladas. Así que la pregunta que me propuse responder es ésta:
¿Cómo tienen que ser las redes[no]empresas que se juntan a trabajar para unos clientes/beneficiarios que esperan unos resultados determinados dentro de unos plazos y unos costes, y que lo hacen además cultivando una relación continuada?.
Esa descripción no es baladí porque es difícil poner en duda la superioridad de las redes para actividades como el aprendizaje colaborativo (tipo “comunidades de práctica”), la generación de ideas, la experimentación de nuevos abordajes culturales o movilizarse a favor de alguna reivindicación colectiva; pero aquí estamos hablando de otra cosa:
Intentamos imaginarnos un modelo reticular, sin lazos orgánicos, que se plantea trabajar por proyectos y respetando las exigencias del mercado, y que pueda superar en eficacia a la empresa.
En el artículo digo que tales exigencias solo pueden cumplirse si concebimos redes de orden superior, algo más que “redes”, y que llamaría de un modo distinto, para distinguirlas de las dinámicas basadas en lazos débiles, que son buenas para lo que son, para propiciar conexiones aleatorias y creativas, pero no para servir productos y servicios al exigente entorno productivo.
Edu William me facilitó la pieza que me faltaba, cuando me dijo en una cena que tuvimos en Canarias: “redes no, comunidades”, y pienso que lo que diferencia una “comunidad” de una “red” es precisamente una característica que eché en falta en el imaginario descrito por María Jesús: “sentido de pertenencia”.
Pero no basta con eso. El viaje de red a comunidad necesita de muchas otras condiciones, y la primera de todas es que las “fuerzas centrípetas” que favorecen la cohesión de grupo superen en intensidad a las “fuerzas centrífugas” que obedecen a las expectativas más personales de sus miembros.
Las buenas comunidades consiguen gestionar muy bien esa tensión que se produce entre el yo-socializador y el yo-individualista.
Lo que yo digo es que sin sentido de pertenencia no se consigue una red cohesionada, estable y productiva; y que ese sentido no debe plantearse como un acto de renuncia tan doloroso, porque en las comunidades sanas responde a una elección voluntaria.
Y lo que es más importante, ese vínculo se forja sobre un principio insoslayable: bajas barreras a la salida, nada de ataduras, libertad para dejarlo cuando quieras sin un coste emocional y/o material significativo. Esto último es fundamental para que el sentido de pertenencia sea auténtico, pero OJO, no quiere decir que nos libere de hacer sacrificios. Si alguien piensa eso, se equivoca:
No conozco ninguna comunidad que funcione bien, que rinda y sea productiva, construida sólo desde una visión individualista.
Algunos sacrificios hay que hacer, pero los justos. La esencia de una red es generar y aprovechar sinergias, y éstas no se producen por generación espontánea, sino que exigen un proceso de construcción de confianza y de compromiso. Para ello hay que generar estructura, dinamizar interacciones y también, cómo no, moderar los egos.
¿Pero… cuáles son esas “fuerzas centrípetas” y “centrífugas” que influyen en el éxito o fracaso de las redes-comunidades-no-empresa?
Te presento la Tabla-resumen con la que intento dar algunas respuestas a esa interrogante:
Fuerzas centrípetas (“construyen red”) | Fuerzas centrífugas (“fracturan red”) |
1) Afecto, sintonía, confianza entre los socios | 1) Falta de afinidad emocional, problemas de química entre los socios |
2) Vocación de compartir, talante socializador | 2) Egoísmo, individualismo, miedo al compromiso, necesidad crónica de independencia |
3) Un sentido claro de propósito, un proyecto vital compartido (no solo “ganar pasta”, aunque para algunas redes/personas podría ser razón suficiente) | 3) Dispersión, desenfoque o disparidad de expectativas, objetivos y motivaciones |
4) Liderazgo estructurado, visible y aceptado (es distribuido pero hay “fuerzas tractoras”, varios “facilitadores”) | 4) Anarquía, dilución de roles y responsabilidades (nadie coordina, se espera que la estructura emerja por generación espontánea, sin esfuerzo) |
5) Filtros y criterios para entrar. Salir es libre, pero entrar no. El “quienes” importa, porque la comunidad es una cuestión de personas. | 5) Libertad total de entrada, afiliación abierta. |
6) Identidad compartida y ética de grupo. Reglas de juego que fijan límites (aunque flexibles) al territorio vital donde se mueve la comunidad. | 6) Anarquía, ambigüedad, laissez faire, todo-vale |
7) Complementariedad y sinergias entre competencias y habilidades de los socios (“nos servimos mutuamente”) | 7) Redundancias y uniformidad en las capacidades (“nos pisamos, hacemos lo mismo”). |
En el artículo avanzo brevemente algunas interacciones o paradojas que se pueden producir entre esas 7 fuerzas que actúan vertebrando o fracturando las redes [no] empresas.
Mi buen amigo Peter Hodgson me hizo ver que la tabla-resumen tiene tela, casi todo es discutible, y merece un repaso a fondo. La complejidad se hace patente, por ejemplo, en el impacto de un exceso de intensidad en algunas fuerzas o en conflictos entre fuerzas del mismo signo.
Por supuesto, como digo en el artículo, siempre queda la opción de apostar por redes más “líquidas”, efímeras, para abordar acciones puntuales, y sin ningún sentido de continuidad. Te en-redas en itinerancia, hoy con estos y mañana con aquellos. La unidad de conexión son los proyectos, y los socios cambian a placer. Tú eres el centro, nada de lazos estables porque la independencia es tu verdadero proyecto vital.
Pues nada, si te animas a completar la lectura del artículo, espero que su lectura te sea útil, y aquí te ofrezco un espacio para continuar la reflexión.
tvc
Greetings! Very helpful advice within this article! It is the little changes which will make the largest changes.
Thanks a lot for sharing!
Odilas
Mejor no digo nada más no? 🙂
WOW Amalio, he estado “lejos” y ajena al debate. Impresionante.
Enhorabuena por la conversación!!
Nos vemos pronto. Un abrazo.
Amalio
Gracias, María Jesus, por pasarte por aqui. Un saludo!!!
Rayco Expósito
Interesante y enredado post, con tu permiso me atrevo a participar en la conversación. Coincido con las opiniones de varios de los participantes, se puede hablar de una “No-empresa” y a la vez querer atender a unos clientes con unos plazos, unos costes y una eficacia determinada…?? Parece como si la no-empresa hipotética estuviera alienada por los mismos principios que se rige toda empresa.
Me entró la duda de si todo este planteamiento lo has razonado pensando en la actividad de “una empresa de consultores” o si te lo has planteado para cualquier tipo de actividad… sinceramente creo que las empresas a medida que la competencia va creciendo, obligatoriamente tenderán a convertirse en comunidades de empresas que comparten toda la cadena de valor.
He intentado ordenar todas las ideas expuestas en torno a este tema y creo que será útil definir los distintos modelos de comunidad estudiados.
Las Comunidades de Práctica con perspectiva de comunidad son: “grupos de personas que comparten una pasión por algo que saben hacer y para interactuar regularmente para aprender cómo hacerlo mejor.” (Etienne Wenger)
Las Comunidades de Práctica con la perspectiva del negocio son: “Un grupo de instituciones autónomas y las personas cuya práctica está alineada con los imperativos estratégicos y tienen el reto de crear valor para el accionista mediante la generación de conocimientos y el aumento de las capacidades.” (Hubert Saint-Onge). Dentro de éstas a su vez se pueden diferenciar dos tipos; las vinculadas a una estrategia algo más global y las vinculadas a un proyecto común concreto.
¿Qué ejemplos prácticos podemos poner de un caso y otro? Pues para el primer caso yo eligiría la comunidad de software libre (sentido de pertenencia arraigado, no siempre comparten su proyecto vital pero si confluyen asiduamente). Este tipo de comunidades tienden a centrarse en actividades como: ayudar en la solución de problemas (p2p), Desarrollar y verificar las mejores prácticas, Actualización y distribución del conocimiento en el uso diario…
Para el segundo caso, el tipo de “Comunidad Negocio” es más estratégica un buen ejemplo que me viene a la cabeza es el proyecto http://www.mindproject.net/?p=equipo En este caso lo que tratan es de acelerar el ritmo de introducción de una innovación disruptiva, facilitar el cambio de cultura o el desarrollo de un nuevo mercado… Este tipo de comunidades generalmente surge por un “gurú” que sirve también como imán para atraer miembros. Se trata de cumplir unos objetivos específicos y la propia comunidad proporciona los recursos necesarios para llevarla a cabo.
Una comunidad menos estratégica, las que se centran en un proyecto concreto y delimitado (yo las asimilaría directamente a las empresas abiertas) son grupos de personas que comparten una pasión por un proyecto que decidieron colaborar, y perfeccionar su talento y la competencia colectiva en la entrega de la misma. Su recompensa es: Satisfacción individual, la compensación por la colaboración, promoción de la capacidad para iniciar, colaborar, y completar estas acciones y el aumento de facilidad, eficacia, eficiencia y disfrute para otras ocasiones.
La pregunta es: si esa “no-empresa” teórica de la que hablas no se encuentra representada en ninguno de estos tipos de comunidad dónde habría que situarla???
Amalio
Rayco: Gracias por la taxonomia, y el conocimiento que compartes con nosotros. La verdad es que hacer una clasificación de todo esto es complicado, y no tengo tan claro que aporte un gran valor. Vale, podemos usar el término “estratégico” como apellido de las comunidades “productivas y estables”, aunque se trata de un adjetivo que también cabría en cierto modo para una no-empresa más temporal, centrada en un proyecto, en la medida que sirva como lanzadera para sus miembros. Pero yendo a tu pregunta, creo que de los ejemplos que pones el que mas se acerca al modelo de “red no-empresa estable y productiva” es la comunidad que emerge en torno al concepto de Tourism Revolution Workers. Es un atrevido (en el buen sentido de la palabra) ensayo de ecosistema estable de colaboración con vocación productiva basado en personas autónomas que a su vez pueden funcionar como nodos.
Pero insisto, los otros dos modelos que describes tienen sentido tambien, y caben dentro de la biodiversidad organizativa de las no-empresas. Y seguro que se nos quedan por ahí otros posibles “modelos”, asi que la taxonomia está abierta… ¡¡gracias por tus interesantes aportaciones!!
Ricardo_AMASTE
Joooooooder!
Anima ver a tanta gente compartiendo los mismos interrogantes, ver como cada cual aporta sus soluciones, matices…
El viernes que viene tenemos una especie de reunión de emrpesa-estructura para ver como seguimos avanzando en la deconstrucción de nuestro no-modelo.
Gracias por la agitación!
Amalio
🙂 🙂 me alegro verte por aqui, Ricardo. Somos muchos los que compartimos los mismos interrogantes, más de lo que parece. Te podras imaginar lo que me ha animado a mí ver a tanta gente con sensibilidades parecidas y diferencias de las que aprender. Los sutiles “matices” que hacen del debate algo tan hermoso. Suerte con tu reunión del viernes. No vayas a “deconstruir” demasiado, no se te vaya la mano… :-))))
gracias a ti por el ánimo!!!
facilitymanager
Hola, iba a seguir la discusión pero se me ocurrió algo mas largo y lo publique como post en mi blog. me gustaría me visitaras alla.
Saludos
Alberto
http://facilitymanager.blogspot.com/2010/05/redes-sociales-evolucionan.html
Amalio
Gracias, Alberto. Ya he entrado en tu blog y comentado tu interesante entrada. Buena reflexión. Tenemos que seguir pensando juntos. Nos leemos, ¡¡un abrazo!!
Julen
Estupenda toda esta conversación. Ayuda mucho a hurgar en contradicciones y matices.
Yo veo el asunto -ya lo sabes- de una forma bastante diferente. No veo “un modelo de red o empresa… bueno sí que lo veo pero en forma instrumental y no finalista. Están surgiendo alternativas diferentes, que funcionan en entornos concretos; en unos sí y en otros no.
También creo que las dinámicas reticulares son… por decirlo de alguna forma, “incontrolables” y que se mueven en un plano de redundancias (mira Internet) y al margen de las lógicas clásicas de las organizaciones tradicionales.
En fin, muy interesante todo esto, Amalio. Es estupendo que hayas provocado toda esta conversación.
Saludos.
Amalio
Gracias, Julen, para eso estamos, para conversar. Ejercicio muy nutriente.
No estoy tan seguro que tu veas el asunto “de una forma bastante diferente”. He seguido tu viaje, porque como sabes soy un lector asiduo de tu blog y compartimos experiencia en #redca, y creo que coincidimos mucho más de lo que pueda parecer por tu comentario.
Tampoco yo veo un unico modelo de red, ni para mí las redes son un objetivo en sí mismo. Son, efectivamente, un instrumento.
Estoy en tu linea de que hay que defender la biodiversidad. Algunos se apuntarán a redes efímeras, liquidas, cambiando-socios… mientras que otros se sentirán mas cómodos en redes-comunidades basadas en relaciones mas duraderas. Ambos “modelos” tienen sus ventajas y desventajas.
Las dinamicas reticulares tienen una parte “incontrolable” pero tambien otra “controlable”. El ratio entre las dos está bajo discusión, y no sabemos todavia si es tan buena la barra libre. Se puede poner un poco de orden en Internet si el repositorio de colaboración es pequeño. Una cosa es Internet, como fenómeno, y otra la comunidad que quieras construir utilizándolo como instrumento. Creo que podemos “controlar” mucho más de lo que ultimamente se dice. Pero claro, el “descontrol” viene mejor a algunos que a otros. OJO, que no se me malinterprete usando esa fea palabra de “control”. Solo quiero decir que el hombre es dueño de su destino, y tendría que ser capaz de hacer con Internet lo que quiere, y no al revés.
Si te juntas con un grupo a trabajar, te sientes cómodo con ellos, aprendes a no aburrirte tan rápido de la misma gente (el zoom puede ser tan excitante como cambiar de foco), descubres un propósito que valga la pena, encuentras motivos para contener tu individualismo y comprendes que los “lazos débiles” están a menudo sobrevalorados, puedes llegar a preferir cierto modelo de redes-comunidades.
Es estupendo para mí que te hayas pasado por aqui. Muy agradecido, de verdad!!
edu william
hola amalio
me parece excelente el debate que se ha provocado y tu exposición en el post.
creo que saber transitar en este diseño productivo, puede ser la clave del éxito de los agentes que quieran proponer relaciones en el mercado.
si me lo permites, simplemente he echado en falta una característica que me parece principal (o igual no me he percatado, disculpa): la transparencia.
es la caracteristica que nos da la oportunidad de no modelizar estandares, y dejar que cada uno desarrolle y plantee su formato óptimo. Es la fuente de energía de un nuevo modelo de “mercado cívico”. Si hay transparencia, la agregación y conexión de nodos, independientemente de las dinámicas que se establezcan en cada red, será voluntaria. Yo incidiría en ello.
gracias por refelxionar y sintetizar tan bien toda esta línea de trabajo, desarrollo y acción.
abrazos
edu
Amalio
Gracias, Edu. Ya sabes, en el artículo hablo de la conversación que tuvimos en Las Palmas, cuando sacaste el término de “comunidades”. La verdad es que la sobremesa con Julio y Carlos estuvo animada. Tu proyecto de TRW está en la línea de todo esto, y es un laboratorio para testar en la realidad las aristas que se visualizan en esta conversación.
Tienes razon, la transparencia es una característica clave en las redes-comunidades que funcionan bien. Sin transparencia, no hay franqueza, honestidad, y todo se pudre. Hay que evitar que las dinámicas de redes entren en lógicas de compromiso falso. Pero creo que para eso, la clave está en tener “bajas barreras a la salida”. Si eso se da, entonces facilitamos un sentido de pertenencia auténtico. Un segundo elemento es la diversidad, la tolerancia a la diversidad. Si castigas a “lo distinto”, entonces “el distinto” va a tener solo dos opciones: 1) se va, 2) se mimetiza falsamente… y ocurre mucho lo segundo.
Gracias a ti por participar. Mantennos al tanto de los avances de Tourism Revolucion Workers, que seguro vamos a aprender muchisimo de esa experiencia!!
facilitymanager
Guao, 29 de Abril el post y hoy es 30 y ya tienes ventitantas opiniones. Me dá envidia bloguera, a veces.
Es el arte de saber proponer un tema que va, además de ser polémico, a ser construido en forma colaborativa. Eso son las redes virtuales en acción. pero son distintas las redes, a las comunidades?.
Según mi amigo E Wenger, que le ha dedicado mucho tiempo al estudio de las asociaciones de aprendizaje y conococimiento y sus consecuencias, me atrevo a citarlo para aclarar un poco la secuencia ascendente en las que podemos estar juntos con un objetivo común.
Comienza con las redes. Una suerte de telaraña de relaciones (Yoriento es muy bueno en eso), que establecen vínculos pero que dependen del tema común o como ustedes los llaman “un barrio común”.
Wenger tambien construye una matríz colocando en el vertical los tipos de asociaciones y los cruza con las siguientes preguntas:
1. ¿Quién las crea?
2. ¿Qué comparten?
3.¿Qué objetivo persiguen?
4. ¿Cuánto duran?
Son cuatro sencillas preguntas pero que aclaran el panorama, sobre todo si coloca a las redes como el nivel mas simple, avanzando por equipo de proyectos, equipo organizativo, hasta llegar a las comunidades de aprendizaje.
Lo interesante es que en este nivel, la asociación es libre, se autorregulan y crean, comparten conocimiento emergente y dura lo que los miembros quieren que dure. Un poco de ecología según lo menciona Brown.
Yo estuve en una Comunidad de aprendizaje por 12 años en la universidad, y escribimos tres libros y participamos en 5 congresos, entre otras cosas. Duró hasta el año 12, fecha en la cual las autoridades de la universidad nos “descubrieron” y pretendieron colocarnos regulaciones. Fin de la historia.
Las comunidades de aprendizaje o de práctica pueden ser virtuales tambien, con la misma fuerza y el mismo peso. Yo creo que #Redca es una comunidad de aprendizaje, si no este post no existiría.
Saludos y mis respetos,
Alberto
Facility manager
Amalio
Alberto:
Amigo, no es pa’ tanto….:-), está muy bien, pero recuerda que la mitad de los comentarios son míos… ¡¡y los más largos!! 🙂 🙁
En cualquier caso, está claro que el tema da para mucho, es sumamente interesante. Pero a mí me gustaría que esto fuera también útil, que no se quede en un mero ejercicio de onanismo intelectual. De pajas mentales ya estamos aburridos, no??
La matriz de Wenger es interesante, creo que vale la pena revisar más ese punto de vista que aportas en forma de 4 simples preguntas. Tiramos de ese hilo.
También el concepto de que “la red dura lo que los miembros quieren que dure”. Está en la línea de las bajas barreras a la salida que tanto insisto en mi articulo.
De todos modos, Alberto, las “CoPs” de Wenger no son estrictamente “para producir” sino “para aprender”, y creo que ahí las exigencias son menores. Eso está en la base del debate que estamos teniendo, y que abrió @Odilas cuando unió “redes” con el adjetivo de “productivas”.
Creo que esa distinción es importante.
Un abrazo, Alberto!!!
Michele Iurillo
Lo de los candidate… es dejar entrar la gente… que merece.. es el famoso filtro de entradas del que tu hablabas.. yo no he trabajado en Pwc.. pero no hay aprendices.. no hay maestros.. como te he dicho no existe el concepto de junior..
te parecia el folleto de una consultora porque era el texto de mi folleto!!! 🙂
pero son cosas que estoy dispuesto a compartir y cambiar.. con otras personas.. pero claro.. compartiendo los valores.. y no dejando entrar cualquiera..
la metodologia se construye.. cada vez..
es como el jazz.. si controlas tecnicamente el instrumento.. y la armonia.. te puede salir incluso melodia..
Amalio
Michele:
En mi tabla hablaba de filtro, pero no de crear un estatus o categoria de personas (“candidates” o “aprendices”) que tienen que superar ciertos retos o trabajos para entrar, mientras otros deciden por ellos. En eso soy binario: estas afuera o estas adentro… pero con todos los derechos = Nadie adentro que no pueda decidir.
“La metodologia se construye, cada vez”… estoy de acuerdo. Trabajar con marcos dinámicos, abiertos. Pero por definición la “metodologia” tiene siempre un componente de estabilidad, de replicación, y quizas esa es su mayor virtud, porque te obliga a respetar un proceso que es hijo de la mejor experiencia. El talento caótico a menudo se pierde por las ramas, y no prioriza lo importante. Hasta un cierto punto de la resolución de un problema viene bien seguir un orden.
Gracias por tu interés de seguir esta conversación, Michele!!!
Alberto Blanco
Amalio, el tema que planteas en tu post da para mucho y los comentarios que he leído así me lo confirman.
Sin duda la mayoría de los conceptos que argumentas son fundamentales para que un modelo en red o en comunidad funcione. Otra cosa es la facilidad para llevarlos a la realidad diaria de la actividad de la consultoría. En todo caso suponen un excelente avance con respecto a los modelos empresariales tradicionales.
En todo caso, me ha llamado especialmente la atención la ausencia del concepto que para mí es la razón de ser de un consultor, el cliente.
Parece paradójico pero durante estos últimos años de abundancia las empresas de servicios, y en particular las de consultoría pasaron a creerse un fin en sí mismo, considerando al cliente como un mal necesario para alcanzar sus objetivos.
Parece que la crisis actual nos está haciendo volver a poner al cliente en el centro de nuestra actividad. Me temo que en muchos casos esto está ocurriendo por pura supervivencia y no por visión, pero en cualquier caso parece que volvemos a pensar en el cliente más allá de un ente que paga facturas.
En mi opinión, si nos olvidamos del cliente y ponemos el foco en el funcionamiento interno de un modelo en red, comunidad o empresa, corremos el riesgo de pensar que la actividad de la consultoría existe para servirnos de los clientes, en vez de servir a los clientes.
Creo que si ponemos al cliente en el centro de nuestra actividad, posiblemente muchos de los interrogantes que planteas se responderán solos.
Felicidades por el post y por haber provocado tanta reflexión y debate.
Un abrazo.
Amalio
Alberto: Así es, el lío lo tenemos cuando vamos de la teoría a la práctica, pero eso es lo bonito de esto. Lo que estamos contando tambien es producto de la practica, estamos haciendo igualmente el viaje inverso, de la práctica a la teoría.
La figura del cliente ha salido en la conversación por un apunte de Miquel. Es cierto, tendríamos que pensar qué rol juega el cliente en estas comunidades, e incluso lo que añadí antes al responderle a Miquel, la idea de que podamos los consultores llegar a trabajar con una “comunidad estable de clientes”, con los que también se genere un sentido pertenencia.
Tienes razon, no podemos poner el foco en el “funcionamiento interno”, pero no creo que sea eso lo que estemos haciendo. La pregunta es: ¿pocos proyectos con clientes similares? ¿crear redes con clientes? ¿relaciones a largo plazo? ¿interacciones líquidas?
Alberto, creo que si pones al cliente en el centro todavía te quedaran muchos interrogantes por responder. Todo no es eso. Sigue siendo importante mejorar el modo en que producimos para nosotros mismos, para estar mas satisfechos con nuestra vida. Una empresa tradicional puede poner el cliente en el centro, algunas lo hacen, y tener unos trabajadores absolutamente empobrecidos en el sentido mas amplio de la palabra. Tenemos que explorar modelos donde clientes y “proveedores” sean igual de importantes. ¿sabes por qué? porque a veces somos clientes, y a veces proveedores.
Gracias, Alberto, ha sido útil que nos recordaras la importancia que tienen los clientes para no tener una mirada demasiado para-adentro.
crisfigueroall
estimado Amalio, estaba mirando con mucho detenimiento el articulo, el post y sus comentarios. felicitaciones por abrir un tema que siempre esta dando vuelta, pero lo interesante es que lo haces desde una mirada de reflexiones colaborativas y compartidas. es decir nacen desde el movimiento de redes.
creo que muchas veces nuestras discusiones sobre redes están muy condicionadas a distinciones conceptuales particulares, pero no necesariamente desde una mirada metodológica integral.
justamente ayer hablando con un viajo amigo .. discutíamos sobre el tema redes, donde el punto inicial de la red es la persona conectada con otras personas o sistemas de actividad humana.
preguntas del tipo ¿por qué la redes? y ¿qué son las redes? no necesariamente están resultas o discutidas. a veces nos preocupamos más por decir que trabajamos y vivimos en red que entender que hay detrás de las redes.
me gustaría mucho seguir conversando, creo que el tema da para muchas vueltas y colaboraciones.
saludos y nuevamente muchas gracias por abrir estos debates.
Amalio
Crisfigueroall: Gracias, tienes razon. Es un tema apasionante que por complejo, se debe manejar con un maximo respeto a la diversidad. En eso estamos…
Tenemos un monton de preguntas sobre las redes/comunidades sin responder. No deberiamos esperar a que esas respuestas vengan de un libro escrito por el gurú de turno. Está bien que pensemos nosotros, en descubrir como bien dices ¿que hay detras de las redes?
Gracias a tí por participar!!!
Alberto
Me quedo un poco abrumado ante la abundancia de hipótesis sobre el equilibrio entre fuerzas centrífugas y centrípetas. Me parecen intelectualmente interesantes y bien trenzadas.
Pero, disculpadme, todavía voy un paso atrás… en los paradigmas de donde viene este asunto: ¿Se pude construir un modelo fiable y válido para una realidad tan diversa y cambiante?
Tengo la sensación de que quizás estamos intentando construir un modelo para una realidad inmodelable. Nos hemos empeñado en construir modelos de predicción económica y la realidad inmodelable y compleja ha ido por unos derroteros diferentes. Del mismo modo, si nos empeñamos en encontrar el Santo Grial, puede que cuando lo encontremos ya no esté allí (Heisenberg).
En este sentido, a mi me ayuda pensar en la analogía de la biodiversidad y la evolución de las especies. Al fin y al cabo, las redes sociales son una hiperconexión de redes neuronales individuales.
Entiendo que hay una especie de ley universal o de la naturaleza que establece que los organismos simples van entrando en interacción y poco a poco van estableciendo estructuras más adaptadas y complejas a las que se llega por la vía de aportar diferencias y por la vía de que las inadaptaciones no encuentran ubicación.
En esa línea, no sé si cuando buscamos estructuras estables de cooperación no estaremos influidos por un valor del paradigma clásico de empresa que se ha convertido en el mismo motivo de su incapacidad de adaptación.
Yo creo en un planteamiento más caótico, menos planificado, más diverso. No creo que se pueda establecer un “itinerario para la creación de redes productivas”. Tampoco creo que la estabilidad de las redes sea necesariamente un valor, ya que cuando las cosas se estabilizan en entornos cambiantes pierden adaptabilidad.
Creo más bien en que la naturaleza diversa de cada uno de nosotros encontrará caminos diversos que recorrer por ensayo-error y difícilmente exportables a otras personas y otras redes, dado que estarán construidos de diversidad.
¿Algunos factores comunes? En esta situación, junto con la diversidad y complementariedad, veo siempre a la confianza como el pegamento básico cuyos componentes principales son el conocimiento mutuo y la negociación continua de intereses individuales y compartidos.
Vamos, una mezcla tan compleja como la del caldo marino de donde dicen que surgió la vida…
Amalio
Alberto:
El tema es abrumador, coincido. En relación con tu pregunta, depende de dónde pongamos el liston para definir a qué llamamos “fiable y válido”.
La realidad es diversa y cambiante, testaruda, no cabe en modelos, pero no podemos renunciar a comprenderla, con humildad, y por eso creamos cartografias que nos ayuden a pensar. Ese es el papel de los modelos, con todas sus pobrezas y limitaciones.
En los “modelos” tambien cabe la “biodiversidad”, un término que defiendo como tú, si abandonamos propuestas binarias o maniqueas. En el artículo reconozco que las relaciones no son lineales, que hay paradojas, y al proponer esas “fuerzas”, lo que intento es ordenar un poco el análisis, crear esa cartografia dinámica que aporte pistas para la reflexión. Te confieso que al ver la tabla terminada sentí que eso me ayudaba a pensar mejor. No está planteado en lenguaje de conclusiones inamovibles, ¡¡que dios me libre!!
De todo lo que dices, quiero detenerme en una idea que me parece muy interesante, y te cito: “No sé si cuando buscamos estructuras estables de cooperación no estaremos influidos por un valor del paradigma clásico de empresa que se ha convertido en el mismo motivo de su incapacidad de adaptación”.
Puff, me has puesto a pensar… porque conectas con apuntes inteligentes que ya nos dejó Miquel antes, y en los que Eugenio insistió después. Entiendo que te preguntas si realmente necesitamos “estructuras estables de cooperación”, porque ves en esa busqueda de estabilidad una fuente de problemas. ¿es eso?
No lo sé. Tenemos que seguir pensando. Ya defendí antes con Eugenio las ventajas de los efectos-acumulativos que emanan de patrones estables de colaboración. Al final, como siempre, depende de lo que llamemos “estable”. Ya comenté antes que eso para mí no significa “para toda la vida”. Mi idea no va por ahí. Diría que “colaboración estable” es aquella que se puede mantener con el mismo grupo de personas para varios proyectos. Es decir, repites equipo de personas (al menos “el nucleo”) en varios proyectos. Eso puede durar un año, dos, cinco, no sé. Pienso que mantener un hilo conductor de personas, un “nucleo fijo”, ayuda mucho para responder a las dificiles exigencias del ámbito productivo, aunque pueda ser menos excitante que cambiar de novia/o cada mes.
No se puede establecer un “itinerario unico para la creacion de redes productivas”, estoy de acuerdo. Pero sí unas condiciones o premisas que tienen mas probabilidades de favorecerlas. Si crees que haciendo algo aumentas las posibilidades de que la cosa salga de un 30% a un 70% (sigue habiendo un 30% de que no funcione), ya es bastante, y vale la pena averiguarlo porque eso tiene un valor operativo.
Lo caótico está de moda, es glamouroso. Esta bien como alternativa al exceso de previsión, pero me parece que empezamos a exagerar. Pero ademas, creo que somos muy hipócritas con eso, no estamos siendo objetivos. Defendemos la no-planificación, y al mismo tiempo, nos hartamos de criticar al politico o directivo de turno que no ha tomado las medidas preventivas necesarias para evitar algo que iba a pasar, e incluso los llevamos a los tribunales. ¿como se puede sostener que no hace falta una estrategia, una dirección, un rumbo? ¿como vas a optimizar recursos sin orden, en el caos? ¿como gestionamos la diversidad si no nos ponemos de acuerdo en unas reglas minimas de convivencia?
Dices: “No creo que la estabilidad de las redes sea necesariamente un valor, ya que cuando las cosas se estabilizan en entornos cambiantes pierden adaptabilidad”. ¿Es una ley eso? No, no es asi “necesariamente”. Una red bien armada puede ser estable en su nucleo duro, y gozar de muchisima flexibilidad. La capacidad de adaptacion de una red está en la cabeza de las personas, y no en el numero, ni en la rotación de sus miembros. Es más, crear estabilidad puede ser una estupenda estrategia en entornos cambiantes.
Por cierto, en el artículo comenté que se puede apostar por modelos más efimeros, mas liquidos, de redes. Y dije que eso dependía de las neuras de cada uno. Hay gente que se aburre rapido de las cosas, que necesita cambiar constantemente. Cada cual que elija el plato que prefiera del menu, y que experimente con cuál es más feliz. De eso se trata. No proponia una receta universal. Solo dije que las redes “estables y productivas” tienen unas determinadas premisas.
Gracias, Alberto, por tus ideas.. ¡¡un saludo!!
José Luis Gato
Independientemente de lo discutible o no de los elementos que se presentan en la tabla, ¿por qué una tabla y no una matriz? Cuando intentamos simplificar no sólo visualización sino conceptos olvidamos que el sentido de pertenencia también le corresponde a nuestras propias representaciones de lo supuestamente universal como “propiedad”, “libertad” o “fracaso”. Incluso dudamos de lo que es independencia. No pueden existir modelos puros, es más, no deberíamos perder el tiempo buscándolos. En el mismo momento en el que se plantea “unificar conceptos” ya estamos construyendo híbridos.
Personalmente, prefiero mirar esa tabla como un puzzle en 3D donde quizá no una fractura, pero sí una astilla se vuelve fuerza centrípeta. Es una de las ventajas de una red [comunidad] frente a una estructura fija, diversas formas (no sólo teóricas) de hacer una criba. Ahora bien, si la criba es de Eratóstenes, que no se queden los “primos” en su connotación peyorativa, sino esos pequeños egos que para construir con sentido se apoyen en la “necesidad” de ser el multiplicador del producto. 🙂
Enhorabuena por el post, un abrazo.
Amalio
Jose Luis: Gracias por pasarte por aqui, me alegra verte.
Perdona, no entiendo lo que dices de la “matriz”. Una tabla de filas y columnas es una matriz, una configuración bidimensional de información. Solo faltaría ponerle una etiqueta formal a cada fila, pero no creo que haga falta.
En fin, perdona, no he entendido el resto que dices. Seguramente porque ya estoy espeso contestando los comentarios, perdona…
un saludo!!!
Eugenio Moliní
Amalio: una vez más me quedo admirando tu valor al exponerte vulnerablemente publicando tus razonamientos y construcciones conceptuales. Esta entrada sobre redes (no)empresas me inspira y me obliga a revisitar razonamientos que abandoné hace años porque una y otra vez acababa en callejones sin salida.
Lo único que me quedó claro tras enredarme yo solito conceptualmente, fué que la empresa no tiene alternativa más que dentro del paradigma que la ha creado, que es de la acumulación de riqueza económica, de conocimiento o de poder. Las redes que emerjan dentro de ese paradigma difícilmente podrán sustraerse al mismo. En ese paradigma las redes que tienen éxito duradero son las que comulgan con el principio de la acumulación: p. ej. las redes de corruptos o las redes que toman las decisiones políticas en clubes privados antes de presentarlas en los parlamentos.
El paradigma alternativo al anterior sería el de la creación de riqueza. En ese paradigma no llega a encontrarse cómoda la empresa, por muy loables que sean las muchas iniciativas que se aproximan al emergente “cuarto sector”. Este paradigma de creación de la riqueza es el entorno natural de la red ya que por su naturaleza efímera no puede acumular riqueza, conocimiento ni poder. Sólamente crea o destruye, pero no acumula.
Y en este dilema estamos cada vez más personas llenos de contradiciones. Por una parte nos atrae la posibilidad de trabajar en red distribuyendo y creando concocimiento, riqueza y em-poderamiento. Por otra parte nos preocupa la necesidad de acumular para la pensión y la hipoteca. En definitiva, que intentamos manejar este dilema como podemos. Buscamos modelos que nos ayuden a ganarnos la vida de acuerdo con nuestros valores y conceptos que nos ayuden a entender y a entendernos.
Muchas felicidades por esta entrada, aunque no comparta algunas de las afirmaciones que haces. A ver si encontramos la forma de contrastar las diferencias de fondo que emergen cada vez que interaccionamos.
Amalio
Eugenio: Pues eso, aqui estamos razonando en grupo. Agradezco tus amables palabras, de verdad, pero no siento vulnerabilidad en el acto de exponer ideas que al final se demuestren equivocadas.
Mi reputación siempre será relativa, es dinámica, crece, decrece, me la creo, no me la creo, hablaran bien, hablaran mal, en fin, nada que perder, y mucho que ganar si ventilo mis ideas.
Sí que me alegra que esta reflexión (te, nos) inspire a pensar, eso es lo que pretendo, y no mucho más.
Eso sí, no quiero “acabar en un callejon sin salida”, porque sé que hay salidas.
Propones varios temas que pueden ser motivo de reflexión. Por ejemplo:
1) ¿las redes tienen que ser “por naturaleza efímeras”? ¿por qué descartas “por definición” la posibilidad de redes estables, más duraderas? (no digo “para-toda-la-vida”, no estoy loco, pero es que a las empresas tampoco les exigimos eso)
2) Todo el tiempo estamos hablando de “empresas” y quizas habría que delimitar bien lo que es eso. La verdad es que el término está viciado porque nos lleva inmediatamente al modelo de la gran empresa tradicional con fines lucrativos, que solo busca la maximización de beneficios. Sin embargo, hay otros tipos de organizaciones (me importa un bledo el tipo societario) que mantienen un lazo orgánico entre sus miembros, un grado elevado de mutua dependencia, y que se plantean objetivos más abiertos, ¿o no? Lo mismo flipo en colores, y no existe eso…
3) El efecto acumulativo no es malo per se, ¿por que lo va a ser? A ver, seguramente me sale la vena de economista, pero lo bueno que tienen las redes estables (“comunidades”) es que producen efectos acumulativos de aprendizaje basados en la experiencia compartida. No tienes que empezar de nuevo, poner el cuentamillas en cero, cada vez que te juntas con gente nueva (eso ocurriría en las redes “efímeras”). Vale, sé que alguien me puede decir: “oye, empezar de cero es bueno, porque es mas creativo” pero yo soy economista, y sé que en el año 3010 todavía seguirá siendo necesario cuidar la eficiencia, aprovechar interacciones ya engrasadas, no perder el tiempo para ponerse de acuerdo cada vez que empiezas algo. Una “red estable” te permite andar rápido al principio, acumular know-how mientras lo compartes. Lo “tacito” se queda, es un activo comun difícil de transferir aunque quieras, mientras liberas todo lo que puedas, lo que es codificado, replicable.
Eugenio, ya sabes, aquí estamos para seguir dándole al coco, pero de forma útil. Nada de callejones sin salida, porque acuerdate lo que ya te dije, las hay, las hay!!!
Michele Iurillo
Olvidaba.. los pilares.. lo que yo llamo dogmas de synergo son:
Low Cost
Eliminamos lo superfluo de la propuesta de valor. Nuestros clientes no pagan nuestra estructura porque no tenemos estructura.
Potenciar el talento
Detectamos el talento latente y lo potenciamos con el objetivo de alcanzar la máxima eficiencia en todos los niveles de la organización.
Cloud Management
Synergo! pretende generar valor para nuestros clientes a través de la formula del “cloud management, de manera que puede ofrecer los mejores profesionales y especialistas facilitar el cambio a nivel estratégico en todas las áreas.
Common Creative
Todos nuestros conocimientos van a estar bajo la licencia Common Creative.
como me gusta siempre decir.. no existe la metodología.. existe el talento..
sobre el proyecto de vida.. mi sueño es
33% trabajo
33% aprendizaje continuo
34% Familia
si trabajas en una EMPRESA.. no puedes hacer esto..
esto no es para todos.. un abrazo
Amalio
Michele:
Perdona, creía que estaba leyendo un folleto de una consultora, esos que prometen talento, máxima eficiencia, valor, los mejores especialistas y soluciones estratégicas para “todas” las áreas. La aspiración es elevada, y no está mal que seas ambicioso. Un problema que tienes quizás es que se usa y abusa de ese lenguaje, de promesas parecidas.
Talento y metodología se complementan. El talento explora, la metodologia explota. La metodología es experiencia condensada y ordenada, es una herramienta que ayuda a avanzar rápido en esa parte “estandar” que siempre tiene un problema. A partir de ahí, talento…
Defiendo las metodologias, son muy utiles para pensar. Otra cosa es cómo se usen, con la flexibilidad que se haga. Pero “talento” sin rumbo, sin referencias, funciona solo para ciertos tipos de problemas.
Espero que hagas realidad tu proyecto de vida… ¡¡suerte!!
Michele Iurillo
El debate es super interesante…
Lo que yo pensaba de hacer con Synergo! es aportar más valor al cliente eliminando los costes de estructura.. lleve el proyecto de red como tesis final del curso de liderazgo y desarrollo personal de la Universidad de Mondragon
en mi sistema organizaciónal habia pensado en redes concentricas..
una más interna.. los partners (lo que toman decisiones)
una más externa.. los candidate (lo que aspiran a entrar como partner)
una más externa aun.. el netwrok.. gente que tiene sus proprias aspiraciones y pueden apoyar el proyecto synergo con las competencias que los partner y los candidates no tienen..
y los clientes y proveedores.. aun más externos. pero ligados al modelo
es fundamental que los partners compartan los valores.. y casi un proyecto de vida comun..
hay que generar confianza..
Sobre la no-company.. porque el cliente tiene que pagar.. mi despacho.. mis coches en renting.. mis gemelos de oro.. mantener sueldos.. ?
he trabajado por años en consultoria en “propriedad”..
para manterer estas estructuras.. se pagan sueldos.. que se cargan al producto.. y al final se presiona el consultor.. se le carga como un asno de trabajo.. por una miseria..
en mi filosofia no existen los Junior..
prefiero tener pocos proyectos.. y hacerlos bien.. que cargarme de proyectos para mantener una estructura..
he tenido 3 empresas. en sectores diferentes.. aqui y en Italia.. y la estructura genera comportamientos.. irresponsables.. cenas.. y moviles.. tanto paga el cliente..
el problema es que ya no se vende consultoria a estos precios..
Todas las aportaciones de esta discusiones son optimas..
no he tenido el tiempo de leerla detenidamente..
pero tranquilos.. me genero un podcast de todo.. y me lo llevo en mi proximo viaje en metro!!! 🙂
(porque tener un coche. porque contaminar.. porque no usamos en la medida de lo posible el transporte publico comprartido?)
Amalio
Michele:
1) “aportar mas valor al cliente eliminando costes de estructura”, OK, todo lo que sobre hay que quitarselo de encima,
2) La diferencia entre “partners” y “candidates” (unos deciden, y los otros aspiran a decidir) me suena a PriceWaterhouse, solo que sin estructura. Lo siento, pero no me gusta. En su momento dije que no me gustaba la dicotonomia de maestro-aprendiz, asi que esta tampoco,
3) “compartir valores” sí, un minimo comun denominador en sea relevante para el motivo de la red, pero “un proyecto de vida comun” puede ser excesivo. No pediría tanto, incluso puede ser bastante aburrido.
4) La “estructura genera comportamientos irresponsables”, pues sí, estamos de acuerdo. Pero OJO, hay “estructuras intangibles”, que no cuestan, más bien ahorran.
5) Mi problema no es que ya no se venda consultoria a esos precios, sino que es esencialmente indecente cobrar por superfluos.
un saludo
mkl
Estoy un poco contemplativo con este tema de las redes como alternativas… Así que no voy a aportar mucho porqué tengo la duda que corroe en plena actividad; pero si quiero hacer unas cuantas observaciones a tus ideas:
Consideras a la red como alternativa a la empresa pero le das funciones similares a la empresa: “trabajar para unos clientes… que esperan resultados…”. La red, entonces, ¿no incluye a los llamados clientes? Es que sino lo hace o no tiene vocación de hacerlo, ya no es alternativa, quizá, sino mismo perro con otro collar… ¿no?
Esa idea de equiparación de red con empresa lo veo también en “…se plantea trabajar por proyectos y respetando las exigencias del mercado, y que pueda superar en eficacia a la empresa.” ¿Superar? ¿En eficacia? ¿Respetando la exigencias del mercado? No lo veo claro. Superar es la típica carrera de la empresa. No veo mi red como un intento de superar en nada a la empresa. No quiero competir con ella; y, por lo tanto los criterios de eficacia me son muy cuestionables; tampoco necesito ser más eficaz que ella. De hecho, cuando se requiere eficacia como prioridad, pues, oye, que se lo quede la empresa, que mi prioridad es otra (sin descuidar la eficacia). Y las exigencias del mercado, responder a sus exigencias es jugar con sus reglas y esas han estado configuradas para la empresa, no para la red. Considerar y sortear hábilmente esas reglas, eludirlas y aprovecharlas sabiamente sí. No se trata de ser un ingenuo, pero no “responder” a ellas.
Y, finalmente, las fuerzas centrípetas que enumeras las veo como una descripción de buena empresa, empresa abierta, lo que quieras, pero empresa. Las fuerzas centrífugas, en cambio se centran en el individualismo, la diversidad, el conflicto y la anarquía que son, precisamente, las que dan fuerza a una red y la hacen diferente a una empresa.
Es que las redes que son alternativas existen y son funcionales, y están compuestas por esas fuerzas centrípetas (entre otras) que son las que catalizan su estructura distribuida. Muchas de las “pegas” que se les atribuyen se ven sólo si se las compara con una empresa. Claro.
Y comparto tu preocupación por la “efectividad” de la red como alternativa. Como le comentaba a Odilas, veo a muchas mentes potentes, gente de redes y enredada hablando y pensando demasiado en redes pero sin concretar apenas nada más que intenciones y hermosas teorías…
Vuelvo a mi contemplación, a ver si resuelvo algo… 😉
Un placer…
Amalio
Miquel, me apunto a tus dudas, yo también las tengo sin estar contemplativo… 🙂
Gracias por tus observaciones, todas inteligentes. Te respondo:
1) “Incluir a los clientes en las redes” = Vale, matización oportuna, es fundamental eso. Por cierto, hay muchas empresas que también lo hacen, que “meten” a clientes en sus proyectos, así que eso no es exclusivo de la no-empresa. Sin ir muy lejos, en emotools no se nos ocurriría hacer un proyecto sin que el cliente sea uno más, un socio. Pero volviendo a tu argumento. Los clientes pueden ser el elemento más volátil, pues pueden cambiar por proyectos. Pero lo mismo no, si seguimos una lógica de confianza que permita trabajar a menudo con un conjunto estable de clientes. Es una interrogante interesante: ¿clientes estables, también con “sentido de pertenencia” a esa comunidad? Pues sí, pudiera ser también. Si no se da, pues mira, cambian los clientes-que-participan-en-la-red según el proyecto.
2) Por supuesto que nos planteamos eso si hablamos de alternativa, de algo que “produzca” de manera “estable”. Si no, Miquel, hablamos de una alternativa al sistema, construimos un sistema político distinto en el que el mercado no cuente. No sé realmente donde pones el listón, pero esta discusión es más modesta. ¿dime tú si podemos hablar de una opción alternativa viable que no “supere en eficacia” a la empresa? Si no cumple ese requisito, pues mira, seguimos con la empresa. Está claro en el propósito. Entiende “superar” como lo que es, una “mejor opción”. E interpreta “eficacia” (no “eficiencia”) como “conseguir mejor los objetivos buscados”, sean los que sean, y que pueden ser distintos a los de la empresa tradicional. La “eficacia” es una condición necesaria, necesaria, aunque no suficiente. Esa comunidad si quiere producir y ser sostenible, interactuando con la sociedad que le rodea (no hablo de una comuna hippy que se aísla en la montaña en plan endogámico), tendrá que ser capaz de dar respuesta a las expectativas del mercado. OJO, entiendo tu matización y tu desconfianza, yo también la tengo, pero seamos realistas, porque si no, entonces hablamos de otra cosa. ¿No quieres competir con la empresa? Quieras o no, lo harás. La alternativa “no-empresa” significa reconocer un punto de partida, y superarlo, a menos que seas capaz de encontrar un país virgen donde todo sea un “océano azul”. Ese, mucho me temo, que no existe.
3) Dices que las “fuerzas centrípetas” que enumero son una descripción de una empresa. Bueno, una “empresa” podría cumplirlas también, tendría que ser muy especial, pero empezamos a verlas. Pero lo que yo digo es que esas fuerzas ayudan a construir redes “estables y productivas”, ¿o no? ¿Afecto, sintonía, vocación de compartir, sentido de propósito, liderazgo distribuido… en fin, todo eso no es importante para crear red? ¿Por qué “empresa” y no “red? ¿Qué echas en falta en este listado que solo tendrían las redes? En la empresa tradicional la jerarquía, el peso de la propiedad y el miedo al riesgo (de los empleados, todo hay que decirlo) hace de fuerza centrípeta. En una red desaparece eso, asi que tenemos que pensar en otras amalgamas que generen estabilidad. Es que tu comentario me hace ver que una buena “organización” (olvídate de la figura jurídica, pero con algún lazo orgánico reconocido), que respete esos principios, se parecería a una comunidad.
4) Y aquí entramos en la parte más interesante del debate, en la que mas podemos aprender todos. Dices: “Las fuerzas centrífugas se centran en el individualismo, la diversidad, el conflicto y la anarquía que son, precisamente, las que dan fuerza a una red y la hacen diferente a una empresa”. Tienes en parte razón, al final puede ser una cuestión de intensidad. Pero si reviso mi experiencia vital, lo que yo he visto, no conozco todavía ninguna red “que funcione” de verdad “para producir” (no para charlar, aprender, irse de picnic, compartir hobbies, etc.) donde el “individualismo” pese más que el “talante socializador”, o donde la “disparidad de expectativas” sea más efectiva que la existencia de un “proyecto vital compartido” (aunque cada cual tenga muchos otros proyectos que discurran por otras vías). Hablamos, en definitiva, de tendencias, de factores que pesan más. Es una simplificación, es cierto, pero creo que ayuda a “digerir” el tema de un modo más organizado.
De lo que dices rescato especialmente algo importante: evitemos buscar las ventajas de las redes solo a partir de la referencia-empresa. Imaginemos algo diferente. Esa es una buena intención, pero no sé si es posible con los mimbres que tenemos.
5) Pues mira, tu preocupación por la “efectividad” de la red como alternativa coincide con la mía, solo que usé la palabra “eficacia”. Más de lo mismo. ¿No te parece sospechoso que esas mentes potentes no hayan sido capaces todavía de concretar esas hermosas teorías en cosas reales? Yo sé por qué. Porque tanto maximalismo genera parálisis. Buscamos modelos puros, cuando necesitamos híbridos. La alternativa a la empresa está en algo que rescata también lo mejor de la empresa. Por mucho que digamos que “lo nuestro” tiene que ser algo distinto, el punto de partida es el que es, y si queremos HACER cosas, tenemos que ser honestos con las restricciones.
Un placer para mí también que me tires de la lengua…
Michele Iurillo
Es curioso.. muchos de los conceptos que habéis desarrollado en #REDCA y en este post los comparto a 1000%… también he sido victima de las fuerzas centrifugas… Esto no es para todo.. (estupendo: Filtros y criterios para entrar. Salir es libre, pero entrar no. El “quienes” importa, porque la comunidad es una cuestión de personas. Tienes demasiada razón..yo hize el error de dejar entrar cualquiera.. y nadie entró)
Pues suerte.. !!! Que el Cloud Management, (http://www.synergo.es/?p=697)el Business Movie.. o como queramos llamarlo funcione.. porque el entorno cambia.. y las empresas son dinosaurios.. Yo creo en la No-Company.. el problema que las instituciones no creen en los autonomos..
Un abrazo
¿Que opinais de la iniciativa redtrabaj@ ?
Amalio
Michele: Bienvenido a este espacio. Te agradezco que te tomes la molestia de participar. ¿has sido victima de fuerzas centrífugas? :-(( pues mira, la historia de la redes esta repleta de ilusiones frustradas. Es una pena reconocerlo, pero es así. ¿las razones? pues en eso estamos, pensando, buscándolas…
Antes tenía una perspectiva idealista de como gestionar la entrada a una red-comunidad. Creía en el “todo vale”, que entre cualquiera. Pero con el tiempo, a medida que me voy dando cuenta de la importancia de las personas, me inclino mas a que haya criterios para entrar. Flexibles, generosos, transparentes y con una cierta coherencia. Eso hace que la “comunidad” refuerce un sentido, y cubra necesidades compartidas.
¡¡gracias!!
Millicent
I’m not quite sure how to say this; you made it exmeltery easy for me!
José Miguel Bolívar
Como bien apuntas, muchos de los elementos de la tabla son discutibles. Por ejemplo, creo que un liderazgo distribuido (meritocracia contextual) puede funcionar tan bien o mejor que un liderazgo estructurado. Tampoco comparto la necesidad de un proyecto vital compartido; pueden ser distintos proyectos vitales individuales siempre que se refuercen y/o complementen mutuamente.
Para mí uno de los puntos clave de fricción es el de la exclusividad. Se puede pertenecer a varias comunidades sin que ello implique necesariamente una menor implicación en todas ellas. En el caso concreto de la consultoría artesana, entiendo que como comunidad de práctica incluye, o puede incluir, varias “comunidades de proyecto” más pequeñas y volátiles que surgen alrededor de proyectos específicos.
No soy imparcial. Reconozco mi escasa simpatía y menor fe en la estructura organizativa que es la empresa tradicional como entorno ideal en el que desarrollar “trabajo del conocimiento”. No sé si se podrá salvar el nombre, pero desde luego creo que hay que darle un buen repaso al contenido.
En cualquier caso, planteas un tema realmente interesante y digno de reflexión. Un gran post.
Amalio
Jose Miguel: Gracias por tus comentarios que paso a responder:
1) Un liderazgo distribuido que funciona bien tiene estructura, es “estructurado” aunque de un modo complejo. “Distribuido” y “Estructurado” no son necesariamente antónimos. No es un organigrama, sino estadios dinamicos e hiperenlazados que permiten una adecuada capacidad de reacción.
2) Si hay “distintos proyectos vitales individuales que se refuerzan y complementan mutuamente”, entonces hay un “proyecto vital compartido”. Tiene que haber algo en los objetivos (no solo en el proceso) que funcione como amalgama. OJO: Yo puedo tener 3 proyectos vitales distintos y complementarios, pero solo uno de ellos lo desarrollo en el marco de esa red. Los otros dos pueden ir por otros cauces. Además, estoy convencido que el hecho de que el “proposito vital” sea visible y coincidente, es un factor aglutinador enorme que incluso puede ayudar a superar el efecto negativo de las fuerzas centrífugas.
3) Lo de la exclusividad creo que lo he comentado antes. No estoy pensando en exclusividad. Me explico. Mi “sentido de pertenencia” no es unico e indivisible. Por ejemplo, yo siento eso (y a la vez) hacia: a) mi familia, a la que me siento unido, b) mi red de amigos de Málaga, c) mis compañeras de emotools, d) y por otras iniciativas, muy pocas, en la que participo. Esos ambitos para mi funcionan como “comunidades”, no son simples “redes”. Es que la palabra “pertenencia” asusta, y no deberia ser para tanto…
4) No creo en las “comunidades volatiles”. Esas no son “comunidades estables y productivas”. Es otra cosa, válida tambien, pero llamemos por su nombre a cada cosa… :-))
Por supuesto que tenemos que seguir dándole un repaso a todo esto. Solo empezamos a reflexionar… es muy complejo todo. ¡¡gracias!!